Durante estos días de Semana Santa muchos han sido los españoles que han decidido disfrutar del primer descanso del año en una casa rural. Un alojamiento donde amigos o familias pueden pasar juntos varios días con todas las comodidades de un hotel pero en un entorno diferente. Así es como Paloma Domínguez y Joaquín Sanz, propietarios de Villa Liquidambar conciben la esencia de una casa rural "un hotel de cinco estrellas pero en el campo".

Villa Liquidambar -inaugurada hace dos años y situada en Torrecilla en Cameros- es una casona típica de labranza de finales del siglo XIX que cuenta con dos estancias diferentes y ocho habitaciones. Un ejemplo de todas las diferentes casas rurales que existen en La Rioja y en España y que tiene como máxima "conseguir que sus huéspedes se sientan como en su propio hogar".

Con ocupación completa durante toda la Semana Santa, los propietarios de Liquidambar han explicado en declaraciones a Europa Press que las personas que se acercan hasta su 'villa' vienen buscando "un cambio de aires pero sin olvidar la comodidad, los espacios amplios y el confort". Algo que desde esta casona típica cumplen a la perfección y por lo que no es de extrañar que hayan colgado el cartel de completo durante estos días.

"El pasado domingo llegaron a nuestra casa rural un grupo muy amplio que se fue el jueves Santo y ahora tenemos a otro de 19 personas que ocupan las dos casas y que entre todos son amigos y familiares, tenemos gente de Barcelona, Madrid, Valencia, Cuenca e incluso Angola. Ellos vienen a La Rioja para conocer no solo Torrecilla sino toda la comunidad algo que enriquece también nuestro propio turismo".

Y es que el turismo rural es otra de las bazas con las que pueden contar como reclamo desde esta zona de La Rioja. "Cuando llegan aquí, nosotros les recomendamos muchas actividades que se pueden realizar tanto en Torrecilla -visita al Centro de la Emigración Riojana-como por toda La Rioja, les ofrecemos folletos donde pueden conocer información de la Sierra Cebollera, de museos y sobre todo de bodegas o monasterios".

Todo para conseguir también "aportar un incremento a la economía local". Lo que importa -explican- "es que los turistas que lleguen aquí también consuman y por suerte en La Rioja contamos con numerosas actividades y comercios que ayudan a ello".

Como aseguran desde Villa Liquidambar, esta casa rural que comenzó gracias al cariño de esta pareja a Torrecilla en Cameros, el esfuerzo para hacerse un hueco en el turismo de interior también ha sido "duro y constante". "En una casa rural, como en todo, hay que saber potenciarlo bien e invertir en publicidad y en mejoras para nuestras instalaciones".

Un esfuerzo que se ve incrementado también por los tiempos de crisis. "Por suerte, nuestra casa rural está teniendo mucho éxito y en puentes largos y fines de semana solemos estar llenos, sobre todo en la temporada de primavera, verano y otoño, aún así siempre hay que estar mejorando para conseguir el pleno bienestar de nuestros clientes".

El auge del turismo rural permite a estos propietarios continuar con su sueño porque La Rioja además "ofrece numerosos atractivos que hace que, con ellos y la calidad de nuestras instalaciones tengamos un aforo muy amplio con huéspedes de todas partes de España e incluso de América". La casa rural cuenta con página web: www.villaliquidambar.es