Es lo que tiene la vida política: una abandona su carrera (exitosa por lo demás) de modelo-cantante, se casa con el Presidente de la República Francesa, se dedica en exclusiva a salir guapísima en las recepciones oficiales... Y, cuando vuelve al plató, resulta que mira directamente a la cámara, se queda en blanco tras el grito de "Acción" y comete, en suma, errores de principiante como los de Carla Bruni en el rodaje de Midnight in Paris, de Woody Allen.
Además de la Bruni y sus guardaespaldas (que, por lo visto, han sitiado el set), participan en la película Adrien Brody, Rachel McAdams, Marion Cotillard, Michael Sheen y un Owen Wilson a quien vemos aquí en compañía de Madame Sarkozy. Está claro que atender las órdenes de Woody (quien, recordemos, se las vio y deseó para conseguir a la Bruni para su filme) es mucho más sencillo y relajado cuando uno tiene al lado el Pont des Arts y sus puestos de libros antiguos...
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