En la lucha contra el fraude que el Gobierno tiene intención de iniciar para recaudar mas, también hay sitio para la vivienda. Entre otros aspectos, el Ejecutivo ha puesto el punto de mira en los alquileres. Su intención es intensificar la lucha contra el fraude en el alquiler inmobiliario.

A la espera de más detalles, se sabe que la Administración cruzará la información de la Agencia Tributaria, del consumo de energía eléctrica y del catastro.

De ese modo intentará llevar a cabo un control específico sobre las viviendas y locales comerciales no declarados como arrendados pero para los que "existen indicios relevantes de su uso cotidiano".

Así consta en la respuesta del Gobierno a una pregunta escrita del PSOE. En la misma, el Ejecutivo asegura que durante el año 2012 está previsto desarrollar este control específico del fraude en el alquiler inmobiliario.

En teoría, la Agencia Tributaria podrá descubrir así –con las cifras de consumo eléctrico– pisos y locales en los que realmente se está viviendo o ejerciendo labor pese a que el dueño declare el inmueble como vacío.

Las medidas anunciadas por el Ejecutivo tienen como objetivo la "práctica de las oportunas regularizaciones de la situación tributaria de los contribuyentes y el cobro efectivo de las deudas y sanciones tributarias que resulten de dichas regularizaciones".

Según los técnicos del Ministerio de Hacienda, las rentas por arrendamientos no declarados suponen cerca de 2.500 millones de euros anuales. Según datos del 2010, el 50% de los alquileres de vivienda no se declaran en Hacienda.

En respuesta a otra pregunta –también del PSOE–, el Gobierno asegura que en la declaración de la renta de 2011 la deducción por inversión en vivienda habitual se podrá practicar por todos los contribuyentes, cualquiera que sea el importe de su base imponible, hasta un máximo de 9.040 euros.

Ello es posible tras haberse modificado varias leyes con el Decreto de Medidas Urgentes para la Reducción del Déficit aprobado el pasado 30 de diciembre.