El tribunal de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma juzgará este lunes, a partir de las 10.00 horas, a una mujer de 67 años por presuntamente apropiarse de hasta 47.133 euros de las pensiones de jubilación y viuedad que, aun ya fallecida su madre, continuaba abonando la Seguridad Social en la cuenta de ésta, a la que tenía acceso la acusada como apoderada de la misma.

Es por ello que la Fiscalía le acusa de un delito continuado de estafa por el que reclama para Máxima M.G. cinco años de prisión y el pago de una multa de 4.320 euros.

La acusación pública recuerda en su escrito de calificación que la acusada figuraba como apoderada desde su apertura en 1988 de la cuenta corriente cuyos titulares eran sus padres y en la que la Seguridad Social abonaba, al menos desde 1995, la pensión por incapacidad laboral de su padre, la de jubilación de su madre y finalmente la de viuedad por parte de ésta.

Así las cosas, la acusada, con ánimo de beneficiarse de forma ilícita y ocultando que su madre había fallecido, pese a lo cual la Seguridad Social continuaba abonando las pensiones en la cuenta, se hizo con hasta un total de 47.133 euros -entre 1999 y 2006- mediante reintegros que oscilaban entre los 100 y los 20.000 euros.

Ante esto, la Seguridad Social solicitó en febrero de 2007 a la Banca March, donde estaba abierta la cuenta, la retrocesión de lo indebidamente abonado, siendo el total de 86.814 euros, si bien únicamente constan devueltos 31.531 euros. Ésta es la cantidad que la Fiscalía solicita a la acusada de indemnización en favor de la entidad bancaria.