Alrededor de un centenar de jóvenes de la izquierda abertzale increparon el lunes al ex presidente del Gobierno, José María Aznar, cuando éste abandonó el hotel de Durango en el que había recogido un premio por su "apoyo y compromiso con la víctimas del terrorismo".

Los jóvenes radicales se concentraron frente al recinto hotelero a la espera de que saliera Aznar, que tardó casi una hora en abandonar el hotel, una vez concluido el acto de entrega del premio. Mientras tanto, los manifestantes corearon consignas en contra del Partido Popular, y a favor de la independencia del País Vasco.

El momento de mayor tensión se produjo en el momento en que el ex presidente salió del hotel y los manifestantes recrudecieron sus proclamas.

A éstas se contraponían los gritos de "libertad, libertad" de los simpatizantes del PP que habían acudido al acto.

Alguno de los manifestantes escupió al paso del coche de Aznar, aunque la presencia de la Ertzaintza impidió que los incidentes fueran a más.

Pocos minutos después de que el ex dirigente popular abandonara el lugar los jóvenes radicales se dispersaron.

Aznar: Batasuna es caballo de Troya

En su alocución, el ex presidente consideró que establecer "una negociación política con Batasuna es una burla a la legalidad y significa la sumisión del futuro político del País Vasco, en particular, y de España, en general, a la capacidad de coacción de los terroristas".

Para el ex presidente, esta negociación supondría "una ruptura completa de las reglas del juego democrático y constitucional".

"Es inaceptable que los terroristas, los gestores del terrorismo, los beneficiarios políticos del terrorismo tengan el más mínimo poder de decisión sobre el futuro de la sociedad vasca", recalcó Aznar.

Addemás aseveró que "ETA-Batasuna no puede condicionar, ni imponer, ni inducir la ruptura del marco jurídico del País Vasco ni de España".

"El PP quiere la paz"

Calificó de "infamias" las afirmaciones de que el PP no quiere la paz y precisó que "no queremos que la libertad sea el precio de una paz que sólo ha roto ETA, ni aceptamos que los terroristas tengan papel alguno en nuestro futuro".