La posibilidad de que el BNG se alíe con los populares en la localidad coruñesa de Muros para promover una moción de censura contra la alcaldesa socialista, Caridad González, y que por el momento se mantiene en el aire, podría repercutir en otras localidades de la Costa da Morte. Así, el PSdeG de Carnota admite que, de que salir adelante la censura en el municipio muradano, quedaría la puerta abierta a unirse con el PPdeG carnotés para desalojar el regidor del Bloque.

El portavoz del PSdeG en el municipio de Carnota, Jesús Campos Díaz, afirma que, por el momento, "no se baraja nada", toda vez que reconoce que existe un pacto de las direcciones gallegas de los socialistas y nacionalistas para favorecerse mutuamente la gobernabilidad en los municipios allá donde sea posible.

No obstante, en declaraciones a Europa Press, ha afirmado que si el BNG "falla" en Muros, como ya lo hizo —ha manifestado— en "Fene" o en esa misma localidad durante el anterior mandato, el PSdeG analizaría la situación del ayuntamiento. En este sentido, ha advertido de que las relaciones "no son buenas" y ha remarcado que si los socialistas no están en el gobierno municipal es porque "no quisieron y prefirieron un gobierno en minoría".

El PSdeG de Carnota admite que el PPdeG se "dirigió" a los socialistas, tanto antes de la investidura, como después; pero asevera que esperará hasta "ver qué pasa en Muros". "Vamos a esperar a ver qué pasa en Muros, de nosotros no hay nada que decir", ha remarcado el portavoz socialista en la localidad.

Jesús Campos ha incidido en que, en todo caso, de prosperar la moción de censura en la localidad muradana, cualquier decisión que se adopte en Carnota tendrá que ver "con lo mejor para los vecinos" de ese municipio y estará de acuerdo con lo que se decida internamente. "Lo que está claro es que si no hay un gobierno estable es por culpa del BNG", ha remachado.

"tranquilidad" del regidor

Por su parte, el regidor de Carnota, Ramón Noceda, se ha manifestado "tranquilo" y ha ironizado con que "lo que tenga que venir, vendrá". "No es voluntad mía", ha manifestado en declaraciones a Europa Press, para considerar, asimismo, que entiende que no se debería actuar en un ayuntamiento en función de lo que ocurra en otro.

Sobre la moción de censura de la localidad vecina de Muros, ha considerado que es una cuestión que debe dirimir la Executiva del BNG. Además, ha recordado la existencia del acuerdo global para favorecer los gobiernos de PSdeG y BNG, al hilo de lo que ha asegurado que "los pactos están para respetarse". VIMIANZO

Otro de los ayuntamientos de la Costa da Morte donde el BNG gobierna en minoría es el de Vimianzo, cuyo regidor, Manuel Antelo, se muestra "tranquilo". Lo hace puesto que el gobierno municipal está "resolviendo los problemas" de los vecinos y porque se están sacando adelante los asuntos que se llevan a los plenos.

Además, el regidor nacionalista de esta localidad explica que, en este caso, hay otros problemas políticos como el hecho de que para promover una moción de censura tendrían que ponerse de acuerdo PSdeG, PPdeG y los independientes escindidos de los socialistas y recuerda que hay "varios imputados" de la anterior corporación por irregularidades en adjudicaciones.

Manuel Antelo también recuerda que existe un pacto para toda Galicia que todos, les "guste o no", tienen que respetar. "Creo que en el caso de Muros estamos obligados (a respetar el acuerdo con el PSOE)", ha explicado el regidor de Vimianzo.

No obstante, considera que el caso reciente de Cee (otra localidad de la Costa da Morte en que el BNG se alió con el PPdeG para desalojar al independiente Ramón Vigo) es distinto, toda vez que se arrebató el bastón de mando a un "imputado" (en la Operación Orquesta) y no se rompió un pacto con el PSdeG (que cuenta con una única concejala en el ayuntamiento).