Jesús Iglesias es el candidato de Izquierda Unida la Presidencia del Principado. Nació en Gijón en 1959. Es licenciado en Derecho. Está casado y tiene un hijo, al que dedica casi todo su tiempo libre. Le gusta leer, la música y practicar senderismo.

Los lectores de 20minutos le han ‘entrevistado’ a menos de una semana de los comicios autonómicos. Estas son sus preguntas y respuestas.

P. ¿Por qué IU no está en lo más alto de las encuestas siendo esta comunidad de izquierdas toda la vida? ¿Qué han hecho mal? - (Un votante de izquierdas)

R. IU está subiendo en las encuestas. Ya lo hizo en los comicios del pasado mayo y ahora nos dan una subida. Tan mal, tan mal… no lo estaremos haciendo. Estoy convencido de que nuestra participación en la movilización social, frente a la reforma laboral, y nuestro apoyo a la huelga general va a significar viento en nuestras velas.

P. Me gustaría que vaticinara un resultado. Creo que los asturianos estamos cansados de promesas, de que nos hablen de un futuro que ya no creemos… incluso cansados a la hora de volver a ir a votar.

R. Yo comprendo el cansancio de los asturianos porque en diez meses … tres convocatorias electorales… pero no puede ser un cansancio desmovilizador, sino reflexivo. Hay que preguntarse por qué hay un adelanto electoral. Y la conclusión es por el fracaso de la derecha en esta comunidad, porque en las dos ocasiones en la que los asturianos le dieron la posibilidad de gobernar fracasaron. Esta convocatoria es la oportunidad para pasarle factura a la derecha, tanto al PP como a Foro. No me atrevo a hacer un vaticinio pero confío en la inteligencia y en el instinto político de los asturianos y asturianas para que expresen ese castigo en las urnas.

P. Soy votante de IU desde que fui por primera vez a las urnas. Ahora tengo 25 años y estoy en el paro. Vivo con mis padres y el poco trabajo que encuentro lo encuentro en Madrid. Me estoy planteando seriamente marcharme, con todo el dolor de mi corazón. ¿Qué piensa hacer para evitar la fuga de cerebros? Hechos. - (Ana Suárez).

R. El hecho es que tenemos encima es una crisis tremenda y tenemos que ser conscientes de que es un condicionante muy importante. En todo caso la crisis no puede ser excusa para la inactividad y la inacción que es lo que ha hecho Foro. Es urgente cuestionar la forma en la que se afrontó desde el principio la salida de la crisis y sacar conclusiones. Llevamos más de tres años aplicando las políticas que teóricamente había que adoptar y no solo no hemos salido de la crisis, sino que estamos en una recesión y con cinco millones parados en este país. La reflexión debe incorporar la reconsideración que hemos hecho en Asturias y desde Asturias de ver qué ha funcionado y lo que no. En mi opinión, resultados positivos los ha dado la concertación social, ha sido un buen instrumento; la inversión pública no solo ha servido para avanzar en las infraestructuras sino también para contribuir a generar empleo. La puesta en marcha de organismos que pretenden fomentar la I+D+I y que ahora cuestiona la derecha, como es el caso de Fyct, los planes de autonómicos y locales de empleo han servido para crear puestos de trabajo y el mantenimiento de ofertas de empleo público de empleo también lo han creado. También la defensa de los servicios públicos de calidad.

P. ¿Y el salario joven?

R. De momento es algo inédito. Yo. cuando se anunció a bombo y platillo esta iniciativa de Foro en la Junta, dije que a 31 de diciembre no iban a crear ningún puesto de trabajo y creo que a día de hoy, así siguen. El salario joven, además, nunca fue un mecanismo a más sino que fue un sustituto de los que ya existían.

P. Asturias, 100.000 parados y subiendo. ¿Qué piensan hacer los políticos? ¿Para qué sirve esta reforma laboral? -(Amelia F.J.)

R. La reforma laboral no va a servir para crear empleo, eso no lo dice ya ni Rajoy. Lo hará cuando repunte la situación económica… eso es inventar la pólvora. Esta reforma para lo único que va a servir es para empeorar las condiciones laborales de los trabajadores y para conceder el poder absoluto al empresario, reduciendo la capacidad de negociación colectiva, y facilitando que se destruyan empleo porque elimina los controles administrativos y reduce el importe de las indemnizaciones por despido. Con lo cual el mensaje que se está lanzado al empresario es que les es más rentable despedir a un trabajador con experiencia y condiciones laborales consolidadas, pagarle la ridícula indemnización que le corresponde y sustituirlo por un trabajador joven sin estabilidad, con un contrario a prueba que le permitirá despedirlo un año más tarde sin ninguna indemnización tras haberle tenido trabajando con un salario muy inferior del que le pagaba al primero.

P. Ahora parece que hay que bajar la cabeza y aceptar el 5,3% de déficit de Europa. - (Nel)

R. Nos hemos declarado insumisos frente a esas exigencias y mantenemos nuestra llamada a la rebeldía frente a esas exigencias que se han traducido en destrucción de empleo y parálisis económica. Es suicida seguir aceptando y es necesario levantar banderas de sublevación convencidos de que se van a juntar muchos ciudadanos. La sumisión de los gobiernos a esos imperativos ha significado el sacrificio de la mayoría de la sociedad en beneficio de las élites económicas, financieras y especulativas.

P. La encuesta del CIS le resta escaños y habla de un pacto PSOE-IU y de que UPyD será la llave de la gobernabilidad. ¿Lo habrá? - (Indignado y resignado).

R. No sé. Nuestro único compromiso es la que la derecha no merece gobernar Asturias porque fracasó y porque los problemas de los asturianos les importa un pepino. Sólo les importa la lucha interna por el poder y la titularidad de la marca ‘derecha’ en esta comunidad. Y por eso, por no merecen gobernar esta región y porque es el proyecto antagónico al que representamos, la fuerza que nos den los ciudadanos va a servir para impedirlo, si es posible. Pero no comprometemos nada más porque no estamos dispuestos estar en un gobierno, lo forme quien lo forme, que tenga como línea maestra la política de reajustes y recortes. Estamos para resolver los problemas de los ciudadanos, no los de los bancos.

P. No habrá pacto entonces.

R. El listón está muy alto. Garantizamos que si es posible, si nuestros votos pueden cerrar el paso a la derecha, lo haremos, pero eso no significa que tengamos que estar en el gobierno, porque no estaremos en un gobierno, por muy de izquierdas que se llame, que pretenda ajustar y recortar, porque eso es de derechas.

P. ¿No cree que Asturias debería levantarse, pero de verdad, y luchar por el empleo y el futuro de esta región? ¿Para cuándo un cambio que garantice el futuro de los jóvenes? - (Abuela y madre).

R. El domingo es la oportunidad para ese cambio. Pero claro sólo será posible si la opción política que se compromete con él, izquierda Unida, la que se declara insumisa y no se somete, la que tiene como única prioridad la creación de empleo, el mantenimiento de servicios públicos esenciales, las prestaciones sociales…tiene la fuerza suficiente. No cabe no votar o votar a otros y luego lamentarse.

P. Felicidades por comparar a la derecha con el ‘lado oscuro de la fuerza’ pero no cree que ya son demasiados para intentar luchar contra ellos y sobre todo, que su partido, a lo largo de este tiempo no lo ha hecho tan bien como debería. - (En rojo)

R. Siempre se puede hacer mejor… pero yo creo que hemos sido una fuerza política que se ha opuesto en la política de la derecha. No somos unos recién llegados ni unos advenedizos. Nuestros hombres y mujeres estarán en los piquetes de la huelga general para conseguir el éxito y además hemos hecho todo lo posible para que la derecha no gobernara. Una fuerza como el PSOE, que se reivindica de izquierdas, al menos de forma clara en los dos últimos años gobierno de Zapatero asumió las políticas que la derecha económica demandaba. Cayo Lara decía en una visita a Asturias hace días que la gente votó al PP porque creyó que las políticas de izquierda habían fracasado con el gobierno de Zapatero . El problema es que las políticas de izquierda no fracasaron, estaban inéditas porque no se aplicaron. Fracasaron las políticas de derecha y nosotros nos opusimos a todo eso, en Asturias y en todo el Estado.

P. ¿Qué no hará nunca si llega a ser presidente de Asturias?

R. Olvidarme de dónde vengo y a quién tengo que defender porque me votó.