El alcalde de Toledo, el socialista Emiliano García-Page, ha asegurado que comparte "moderadamente" con el Gobierno central la idea de que las prestaciones públicas que ofrecen los ayuntamientos tengan "una correspondencia en el pago" por parte de los ciudadanos.

"La legislación del Estado plantea inexorablemente, esté mejor o peor el Ayuntamiento, que los servicios que se presten sean servicios por los que se cobre, de manera que ese gratis total que se ha planteado en muchas administraciones se tiene que ir quitando progresivamente", ha declarado el edil a preguntas de los medios durante su visita a una casa rehabilitada.

No obstante, García-Page considera que esos pagos deben cumplir el requisito de "progresividad", ya que, bajo su punto de vista, no se puede "hacer un ajuste de un día para otro. Hay que plantearse decisiones para el año que viene y para el siguiente, pero también decisiones en el plan de saneamiento a 10 años", de manera que todo se haga "de forma moderada y digerible".

Asimismo, ha señalado que "el ajuste tiene que ser progresivo, considerando la razón social de la gente y su situación social", y ha puesto como ejemplo la modificación en las tarifas de autobuses para mayores de 65 años que se han aplicado en Toledo.

Por último, ha nombrado como tercer requisito la necesidad de "ir aumentando los ingresos". En este sentido, y a modo de ejemplo, ha indicado que en la capital castellano-manchega se va a "aprovechar su situación estratégica con el turismo", dando "prioridad a que paguen los de fuera, antes que paguen los de dentro".

Rechaza el copago

A preguntas de los medios sobre la posibilidad de aplicar esos pagos en la sanidad e introducir el copago, García-Page ha asegurado que esa medida "es rechazable de principio", ya que "es sobre todo malo para quien tiene bajos niveles de renta".

"Cualquier medida de financiación de los servicios públicos tiene que hacerse atendiendo a la proporcionalidad de la renta. Lo malo de pagar un euro por una receta —como en Cataluña— es que no es lo mismo un euro de un parado, que un euro de alguien que tiene mucha capacidad económica", ha añadido el socialista.

Por ello, ha declarado que "lo que no discrimina la naturaleza" —en referencia a las enfermedades—, no se puede complicar y hacer igual "en términos fiscales". "Hay que encontrar nuevos mecanismos de financiación de la sanidad, pero con un carácter absolutamente sanitario, porque hay que sentirse orgulloso de la financiación sanitaria", ha afirmado.

Asimismo, ha subrayado que "los servicios públicos no son todos iguales, ni todos tienen que tener el mismo tratamiento", a lo que ha añadido que "hay servicios públicos que tienen que tener un cierto nivel de ingreso privado y se puede acudir a formas entendibles de financiación público-privada. Ahora, la salud es un punto y a parte", ha concluido.