El Debate sobre el Estado de la Autonomía que anualmente sirve de termómetro para evaluar la gestión del Gobierno autonómico se desarrollará este martes y miércoles entre críticas de la oposición por la "destrucción" de los servicios públicos y el aumento del paro como balance de gestión del presidente Alberto Núñez Feijóo, para quien será el último pleno de política general de la legislatura.

Así, en declaraciones a los medios en los pasillos del Parlamento, el portavoz del Grupo Parlamentario del PSdeG, Abel Losada, ha indicado que los socialistas harán una evaluación en la que criticarán la "destrucción de los servicios públicos", con la entrada de capital privado, y la "destrucción del empleo".

Por su parte, su homóloga del BNG, Ana Pontón, ha avanzado en rueda de prensa que los nacionalistas evidenciarán "el fracaso" de las políticas impulsadas por Feijóo, que "están arruinando Galicia", al tiempo que marcarán "aspectos claves" para la recuperación de la crisis económica y denunciarán la pérdida de "derechos de los ciudadanos" y "alternativas frente a los dogmas neoliberales".

Así las cosas, los socialistas ha explicado que plantearán propuestas de resolución acordes con las ideas ya plasmadas en el debate de presupuestos autonómicos bajo el esquema de "recortar en cuestiones que no afecten a los ciudadanos", excluyendo así los servicios públicos, y de "incrementar las aportaciones" de los que "menos afectados están por la crisis".

Tal y como ha expresado, se trata de realizar un ejercicio de "cohesión social", en un momento en que ésta está "hondamente cuestionado", y puesto que se están creando situaciones de personas "al borde de la pobreza y de la exclusión social".

"Cada vez los ricos son más ricos, y los pobres más pobres", ha manifestado Ana Pontón, por su parte, en una rueda de prensa en la que lamentó la situación de "paro y crisis" y la "vía de las privatizaciones" elegida para los servicios públicos. En este sentido, ha asegurado que Feijóo "incumplió su contrato (con Galicia) punto por punto".

Situación "límite"

Así, ha descrito la situación "límite" que viven los sectores productivos" para pedir un "cambio de rumbo" en las políticas del Gobierno autonómico, tales como "una alternativa a los recortes, apoyo a los sectores productivos y una salida gallega" para la crisis.

También ha indicado que es un "momento suficientemente crítico para que Feijóo reconozca los fracasos" y ha advertido de que los actuales presupuestos "son cualquier cosa menos una solución contra la crisis".

En todo caso, y respondiendo a la puerta abierta al diálogo que ha lanzado el reelegido secretario xeral del PSdeG, Pachi Vázquez, a todas las fuerzas de izquierdas; Ana Pontón ha manifestado que el Bloque "está abierto" a hablar con "todos", pero defenderá "sus alternativas" porque "tiene una alternativa al PP".

Reflexión interna

Por otro lado, tanto el portavoz parlamentario del PSdeG, como la representante en la Cámara del BNG, han rechazado que lleguen al debate de política general en un clima de división interna.

Así, Losada ha reconocido que este debate llega apenas "48 horas después" del congreso socialista en forma de "regalo envenenado del grupo mayoritario", lo que "indudablemente no facilita el debate, pero ha negado la mayor al asegurar que el partido no hará el debate "fragmentado".

"El PSOE sabe perfectamente qué línea tiene, estamos trabajando a marchas forzadas, pero nuestras propuestas están trabajadas", ha asegurado Losada, quien se ha sentido "satisfecho" de militar en una formación que después del congreso están "todos trabajando" para lo mismo.

Un día después de que el 69 por ciento de la militancia de Máis Galiza decidiese abandonar el BNG, si bien sus diputados autonómicos y la mayor parte de los alcaldes y cargos institucionales permanecerán en el frente nacionalista, Ana Pontón ha manifestado que los procesos "ya terminaron" y que "no afectan al grupo parlamentario".

"La labor y el papel que tenemos que cumplir aquí es la voz de los ciudadanos que están sufriendo recortes y desempleo, esta es la preocupación que tenemos y en la que estuvimos trabajando estos tres años", ha zanjado.