El indicador, desarrollado con datos recogidos a 606 expertos de toda España entre el 22 y el 29 de febrero, se ha visto sujeto a la confirmación por parte del INE de la caída de la producción agregada del país un 0,3 por ciento en el último cuarto del año 2011, lo que ha enmarcado el contexto económico de febrero.

En el flanco externo, según expresa en una nota, nuevamente las dudas en torno a Grecia han contribuido a "alterar los ánimos". "El problema de la deuda periférica, lejos de solucionarse, va camino de enconarse aún más, con Irlanda y Portugal en una situación muy comprometida y el propio país heleno calificado como 'default' por parte de las agencias calificadoras".

En el ámbito nacional "las cosas no pintan mucho mejor" ya que, casi al cierre del período de esta última encuesta, el Gobierno hacía público el déficit definitivo de 2011, por encima de lo previsto inicialmente y recrecido por el comportamiento de las comunidades autónomas. El dato final fue del 8,51 por ciento, lo que, motivado por la fuerte contracción de los ingresos públicos, "implicaría un mayor esfuerzo fiscal del preconfigurado para 2012".

"Todavía parece demasiado pronto para que la apertura del nuevo tiempo político y las expectativas puestas en las decisiones del nuevo gobierno tengan reflejo en variaciones positivas del indicador de confianza en la economía", añade Fundación Cajamar, que señala también que el Incoex apenas se movió —tan sólo una reducción de 0,07 puntos porcentuales—, quedando el saldo final en -39,41 puntos.

Aunque a nivel nacional la encuesta apenas ha presentado variación con respecto a enero, en los ámbitos de análisis más cercanos a los encuestados la sensación es "ligeramente peor". El indicador se mueve ya en niveles mínimos en 17 meses, con una tendencia clara de caída a corto plazo en función de la marcha de los indicadores de coyuntura.

Con esto, "la peor cara" la ha mostrado este mes el Incoex de las economías municipales, que ha añadido otros 3,24 puntos menos a los registrados el mes anterior. El saldo final del indicador ha sido de -36,96 puntos, con una caída tanto de la situación actual como de las expectativas.