Los trabajadores del transporte urbano de Cuenca han iniciado una huelga de carácter indefinido para denunciar los impagos de la concesionaria del servicio, la empresa Alsina Rodríguez. La compañía debe a los empleados media nómina del mes de enero, el mes de febrero y los atrasos del convenio de 2011.

En declaraciones a Europa Press, el responsable de la Federación de Transportes de UGT y portavoz del comité de empresa, Jesús Sáiz, ha explicado que los trabajadores han acordado por mayoría ir a la huelga, con paros que han comenzado este lunes y finalizarían en caso de que cobren las nóminas pendientes. Si el pago no llega, los paros de 24 horas serán indefinidos, y está previsto que los trabajadores vuelvan a reunirse en asamblea mañana martes.

Sáiz ha explicado que la empresa no ha contactado con los trabajadores al tiempo que ha confirmado que la relación entre empleados y Ayuntamiento es "muy buena", indicando que están en contacto a fin de redactar el nuevo pliego de condiciones del transporte urbano de la capital.

En este punto, ha remarcado, una de las principales reivindicaciones de los empleados es que la próxima concesionaria no pueda repetir los impagos de Alsina Rodríguez, que para Sáiz persiguen "chantajear al Consistorio a fin de que abone la deuda con la compañía de transportes".

El servicio urbano de la capital conquense registra problemas en el pago a los empleados desde el verano de 2010. Así las cosas, los trabajadores decidieron ir a la huelga siempre que a día 10 de cada mes no hubieran percibido sus salarios. La concesionaria achaca los impagos a la deuda que el Ayuntamiento mantiene con ella, y ambas entidades no se ponen de acuerdo con la cantidad, ofreciendo datos que oscilan entre los 2.000.000 a los 4.700.000 euros.

Críticas del ayuntamiento

El concejal de Seguridad y Movilidad, Gregorio Sebastián, ha afirmado que los servicios mínimos del transporte urbano han funcionado "con normalidad desde primera hora de la mañana" y ha criticado que la compañía no haya informado a los usuarios de la huelga en el transporte público.

Así las cosas, el edil ha anunciado que el consistorio presentará una queja formal ante la empresa por la falta de información. A juicio de Sebastián, debía haber colocado carteles informativos en las paradas porque la ausencia de indicaciones oficiales ha "desubicado" a algunos usuarios.

El concejal se ha solidarizado con los trabajadores del servicio de transporte urbano y ha lamentado que la empresa concesionaria los esté utilizando "como moneda de cambio" para presionar al Ayuntamiento y conseguir sus pretensiones.

En este punto, ha asegurado tener constancia de que la empresa "si no ha alentado, al menos ve con buenos ojos que sus trabajadores no hayan cumplido hoy con su trabajo porque considera que esta situación sirve para ejercer presión sobre el Consistorio".

No obstante, ha asegurado que el Ayuntamiento "no se va a dejar intimidar por nadie y va a cumplir con su labor, que es velar por el interés general".

Nuevo pliego esta semana

Gregorio Sebastián ha aseverado que el Ayuntamiento está trabajando para dar una "solución permanente" a este problema y ha anunciado que el nuevo pliego de condiciones del servicios de autobús podría estar listo esta misma semana.

Un pliego que, como ha adelantado, "exigirá que la empresa concesionaria esté al corriente de pago con sus trabajadores, algo que no se contempla en el actual".

Según Sebastián, el nuevo pliego permitirá "recuperar la normalidad del transporte urbano y abrir la puerta a mejoras importantes, como el disponer de información en las paradas". "En definitiva, acabar con un transporte urbano precario que se ha dejado morir en los últimos años", ha señalado.

Servicios mínimos

El Ayuntamiento de Cuenca ha decretado unos servicios mínimos del 50 por ciento, ante la huelga, donde las línea no alterarán ni su inicio ni final de servicio respecto a su horario habitual, según ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.

Además, las líneas 1 y 5 se prestarán con un único autobús, en lugar de los dos habituales, con una frecuencia de 60 minutos; y las líneas 6 y 7 se prestarán también con un autobús con una frecuencia de 120 minutos. En ninguna de estas líneas se realizará refuerzo.

Por otro lado, la línea 8 no modificará su servicio ni el número de autobuses y el servicio a Nohales, que habitualmente se presta con la línea 3 a través del camino de Nohales, se realizará con los vehículos de la línea 8, de acuerdo al horario de esta línea y por la antigua carretera de Madrid.

Asimismo, la línea 4 no prestará servicio al cementerio, la línea 12 se prestará con un único autobús, en lugar de los dos habituales, con una frecuencia de 40 minutos y la línea búho no prestará servicios.