Bush asegura a la UE que quiere cerrar Guantánamo

El presidente estadounidense afirmó ayer en Viena que la mitad de sus 462 presos son «asesinos a sangre fría» que serán juzgados en EE UU.
Por segunda vez en una semana, el presidente de los EE UU, George W. Bush, aseguró ayer que quiere cerrar la prisión militar de Guantánamo (Cuba). Lo dijo por primera vez el pasado viernes, tras su viaje sorpresa a Irak, y lo ha reiterado de nuevo en Viena, donde se ha reunido con la Unión Europea.No obstante, Bush no quiso dar plazos, ya que antes tiene que decidir cuál va a ser el destino de los 462 presos islámicos de esta cárcel, casi la mitad de ellos «asesinos a sangre fría», según el presidente estadounidense. Éstos «tienen que ser juzgados en los EE UU», aunque el Tribunal Supremo de este país aún no ha determinado cuál es la instancia adecuada para procesarlos. Para el resto de prisioneros, Bush admitió que aún no tiene una solución, «ya que no podemos dejar a esa gente libre en la calle».
La UE ha pedido en varias ocasiones la clausura de esta prisión, la última vez la semana pasada, tras el suicidio de tres de sus presos. La familia de uno de ellos denunció ayer que ha recibido el cadáver sin varios de sus órganos «para ocultar las torturas que sufrió».

La UE ha conseguido al menos arrancar a Bush una declaración en la que ambas partes garantizan que la lucha contra el terrorismo se realizará respetando los derechos humanos, aunque no se menciona Guantánamo.

Crisis nuclear iraní

Otro de los temas que ha estado en la mesa es la crisis con Irán. En este caso ambas partes comparten un objetivo común: evitar que siga adelante con sus planes nucleares, aunque Bush no quiso adelantar qué tiene previsto hacer en caso de que el país asiático cumpla su amenaza, el enriquecimiento de uranio a gran escala.

Los estudiantes salen a la calle

La visita de Bush a Viena ha blindado policialmente la capital austriaca. Más de 3.000 agentes, helicópteros y varias tanquetas militares han velado por la seguridad del palacio Hofburg, sede de la cumbre. Por la mañana, cerca de 1.000 estudiantes se manifestaron contra Bush. Los jóvenes portaban pancartas contra la guerra de Irak. Por la tarde, la protesta fue masiva. Entre 5.000 y 10.000 personas salieron a la calle para denunciar la política militarista del presidente estadounidense.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento