Se emplean, sobre todo durante el mes de julio, en comercios y almacenes de grandes cadenas para cubrir la temporada de rebajas. Aunque el sector de la hostelería es la salida más recurrente –y la mejor remunerada: en función de la ocupación, desde los 850 hasta los 1.400 euros– para todo el periodo estival.

Y es que la contratación crece estos meses en el sector servicios un 40% respecto al resto del año, y un 20% en la hostelería. En el primer caso, la duración media es de un mes, mientras que en hostelería es habitual contratar a camareros y cocineros por días o eventos ocasionales.

Quienes recurren a trabajar en verano «suelen ser jóvenes universitarios sin mucha experiencia laboral pero con conocimiento de idiomas y buen nivel cultural», afirman en la empresa Nortempo.

Desde el extranjero

Pero A Coruña también acoge mano de obra extranjera. La mayoría, jóvenes italianos, portugueses y polacos. Sin embargo, ellos realizan trabajos más relacionados con su formación académica.

Envían el currículum con antelación para colocarse en estos puestos y, mientras, pasan sus vacaciones.

Aventura laboral fuera de Galicia

No todos los que trabajan en verano se quedan aquí: Canarias y Baleares son los destinos predilectos de los jóvenes por su oferta de ocio y, sobre todo, por sus sueldos: trabajar un mes como recepcionista de hotel puede reportarte 1.900 euros en Palma de Mallorca, 1.400 si lo haces de camarero en Tenerife. Fuera de España, Inglaterra es la preferida, aunque las motivaciones son el idioma y la aventura.