El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha informado en las Cortes que se va a producir una "importante reducción" del endeudamiento a corto plazo de la región, mientras que aumentará el de largo plazo, lo que, a su juicio, "dará mayor seguridad y estabilidad a las finanzas públicas".

Romaní ha hecho estas declaraciones durante su primera comparecencia en el Parlamento regional desde que fuera nombrado consejero del Gobierno de María Dolores de Cospedal en sustitución de Diego Valle.

En relación a la progresiva disminución de la deuda a corto plazo, el consejero ha explicado que la Consejería continuará negociando con las entidades financieras y estudiará la conveniencia del mantenimiento de dichas líneas a corto "sobre la base de plazos, condiciones y coste y, todo ello, en el marco de la adecuada gestión financiera".

El consejero también ha hablado del pago a acreedores y proveedores. En este sentido, ha señalado que el objetivo de pago a los acreedores en general y a los proveedores en particular continúa siendo uno de los objetivos "primordiales" de la tesorería y "todo ello a pesar de la complicada situación en la que se encuentran las finanzas regionales".

Además, ha dicho que la gestión de la tesorería se realizará atendiendo al "principio de caja única" y centralizando los fondos y valores generados por operaciones presupuestarias y no presupuestarias. De este modo, ha indicado que el sistema unificado de pagos será la herramienta que gestione la tesorería de la Administración General de la Junta y la de sus organismos autónomos.

Asimismo, ha apuntado que su departamento proseguirá en la labor de los planes de disposición de fondos necesarios para controlar y atender el pago de las obligaciones de la Administración regional.

Fuentes de financiación

En cuanto a la gestión financiera y fuentes de financiación, ha dicho que el contexto económico actual continúa "dificultando" el acceso a las fuentes de financiación "siendo la escasez y la restricción sus notas predominantes".

En este sentido, ha manifestado, "seguirá teniendo una importancia esencial la coordinación de los recursos financieros para atender las necesidades del sector público regional gestionando tanto el endeudamiento a largo como a corto plazo".

Se continuará, asimismo, profundizando en la optimización de los recursos financieros minimizando su coste y ampliando su diversificación. En este aspecto, ha continuado, se esperan tener pronto nuevas líneas de financiación como la nueva linea ICO que el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha puesto en marcha, "y a la que tiene prevista acogerse Castilla-La Mancha".

Dicha línea —que contempla la financiación tanto a corto como a largo plazo— permitirá a Castilla-La Mancha el pago a buena parte de sus proveedores y acreedores, permitiendo asimismo una reestructuración de su deuda dotándola de un horizonte temporal más amplio, "reduciendo en la medida de lo posible la financiación a corto pasando así de un endeudamiento coyuntural a uno estructural".

En este marco, ha recordado que el endeudamiento vivo a 31 de diciembre de 2011 de la Junta era de 5.177, 45 millones de euros y el endeudamiento vivo del sector publico empresarial y fundacional era de 1.410,19 millones de euros, ascendiendo por tanto el total de endeudamiento financiero a 6.587, 74 millones de euros.