La Comisión parlamentaria de Investigación de GFB solicitará a la sociedad regional Sodercan que abra una investigación interna sobre los informes técnicos que desaconsejaban la inversión en la fábrica de Orejo y que han desparecido. Si este hecho se confirma, la comisión podría acudir a los tribunales para denunciar un posible delito de prevaricación.

Así lo ha adelantado este martes a la prensa el presidente de la comisión y diputado 'popular', Eduardo Van den Eynde, tras concluir la anteúltima comparecencia, la del técnico de Sodercan Ángel González, quien ha afirmado que el disco duro en el que tenía almacenados los informes negativos al proyecto fue "destruido" y que esta sociedad pública se "saltó la normativa" en el caso de GFB.

Van den Eynde ha anunciado que, tras escuchar a González y al también técnico de Sodercan Miguel Ángel López afirmar que habían escrito informes en los que desaconsejaban la inversión en GFB y que esos informes "han desparecido", la Comisión de Investigación se pondrá en contacto con los responsables de Sodercan para "aconsejar" que se abra "algún procedimiento de investigación interna".

Esos informes no se han remitido a la comisión como documentación y los propios técnicos han manifestado que han desaparecido, "incluso en un caso parece que con el borrado del disco duro. Eso es urgente investigarlo", ha subrayado el diputado 'popular'.

Para el presidente de la comisión, "ha quedado en evidencia" y formará parte de las conclusiones que ha habido dos criterios en GFB, el de los técnicos, que "ha sido siempre desfavorable a la inversión", y el de los políticos, que es "el que ha primado" y el que ha llevado a que "una inversión que técnicamente se consideraba inviable haya concluido en un fracaso de las características de GFB".

Uno de los técnicos dijo en su comparecencia que tenía los informes negativos porque había copiado el disco duro de su ordenador, que ahora la comisión piensa solicitar para que se analice y despejar "la única duda que podría caber", que es si el informe se redactó en su momento o posteriormente.

Si se confirman los informes negativos a la inversión en la factoría de Orejo, Van den Endye piensa que se llevará el asunto a los tribunales porque "ya no estaríamos hablando sólo de negligencia" sino de "prevaricación", en el sentido "de que se toma una resolución a sabiendas de que está desaconsejada desde el punto de vista técnico y por tanto, que puede causar un quebranto a las arcas públicas", ha explicado.