Sarah Porter, una británica de 43 años, se ha convertido en la primera mujer condenada a pena de prisión -32 meses- por contagiar deliberadamente con el virus del sida a un hombre -su ex compañero sentimental-.

Sin embargo, el asunto podría no quedarse ahí.

La policía británica busca a decenas de hombres que podrían estar infectados con el virus del sida por haber mantenido relaciones con esta recepcionista, madre de un niño de seis años.

La punta del iceberg

Aunque Porter ha reconocido ante el juez que ha mantenido relaciones sin proteción con cuatro hombres diferentes en los últimos seis meses Porter, un detective asegura que estos casos serían "la punta del iceberg" de lo que podría ser.

La policía, que sospecha que Porter podría haber estado motivada por un afán de venganza, ha hecho un llamamiento a todos los que hayan mantenido relaciones con la mujer para que den su caso a conocer.

La mujer conocía a sus víctimas en clubes nocturnos de Liverpool, Leeds, Manchester y Birmingham (norte de Inglaterra) y se cree que la mayoría eran disc-jockeys y gente relacionada con ellos.