El candidato a la secretaria general del PSPV, Ximo Puig, ha mostrado su confianza en que el Congreso Nacional de los socialistas valencianos previsto para los días 30 y 31 de marzo y 1 de abril les permita salir "unidos y fuertes" para "capitanear" el futuro de la Comunitat".

Así se ha pronunciado en el encuentro mantenido con militantes y simpatizantes de Benicarló que ha tenido lugar en la sede de la agrupación. Puig ha estado acompañado, entre otros, por la portavoz socialista en el ayuntamiento, Xaro Miralles, y por el secretario de la agrupación local, Román Sánchez.

Para ello, ha explicado, que "el partido solo tendrá futuro y solo será la alternativa que está demandando la sociedad si somos capaces de contar con todos, de abrirnos a la sociedad civil y si somos capaces de tender puentes con muchos colectivos que, en estos años, han dejado de confiar en nosotros".

Para Puig, lo "fundamental" es los socialistas no se "pierdan" en discusiones "estériles" y poner sobre la mesa aquellos temas que "de verdad" preocupan a los ciudadanos y ciudadanas, "como la grave afrenta que supone la reforma laboral aprobada por el PP que acaba con 35 años de equilibrios entre empresas y trabajadores o la millonaria deuda de la Generalitat con muchos profesionales a los que está ahogando por haber despilfarrado durante los años de bonanza, el dinero público".

Mejores propuestas

Así, dentro del proceso pre congresual, Ximo Puig ha invitado a los militantes a escuchar y ver "quién tiene las mejores propuestas", ha destacado la necesidad de impulsar las sedes del partido, "porque deben ser la verdadera casa del pueblo".

El también diputado en el Congreso expuso los cinco ejes de L'Alternativa Progressista, el primero de los cuales pasa por "reconstruir el proyecto, hacerlo creíble y solvente", para lo que ha dicho que los socialistas necesitan "un cambio de modelo productivo que nos permita generar el empleo que necesita la Comunitat Valenciana y especialmente una provincia como la de Castelló, castigada por los 17 años de apuesta por el ladrillo que practicó el PP".

El segundo de los ejes pasa por "replantear las políticas municipales para hacer políticas desde la base y pisando el territorio". Según Puis, los socialistas "necesitan" un proyecto central valenciano y europeísta "para plantar cara a la derecha" y en ello centrarán el tercer eje de L'Alternativa Progressista.

El cuarto punto pasa por reforzar la democracia, con mayor protagonismo de los militantes, para elegir al secretario general por sufragio universal, y no por medio de delegados, como se viene haciendo hasta ahora". Ximo Puig y la mayoría de delegados de Castellón votó a favor en el reciente congreso federal celebrado en Sevilla de que la elección del secretario general fuera mediante esta fórmula, aunque la propuesta fue rechazada.

El quinto de los ejes sobre los que descansa L'Alternativa Progressista plantea reforzar el partido a partir de la ampliación de la militancia, de la base social, abriendo puertas a los simpatizantes "para buscar la complicidad de una sociedad civil que espera mucho más de nosotros". Para ello, Puig se compromete a buscar fórmulas para facilitar la militancia, potenciar las agrupaciones y dinamizarlas para que sean mucho más accesibles y útiles a la sociedad.