‘Txapote’ y su novia se niegan a declarar en el juicio de Blanco

La madre no quiso ver a los etarras y se bajaron unas persianas dentro de la sala. Los terroristas se mostraron desafiantes.
Francisco Javier Gaztelu, ‘Txapote’.Irantzu Gallastegi, ‘Amaia’.
Francisco Javier Gaztelu, ‘Txapote’.Irantzu Gallastegi, ‘Amaia’.
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Francisco Javier Gaztelu, ‘Txapote’.Irantzu Gallastegi, ‘Amaia’.
Ayer comenzó en la Audiencia Nacional, en Madrid, el juicio contra los etarras Francisco Javier Gaztelu, Txapote, e Irantxu Gallastegui, Amaia, acusados del secuestro y asesinato en 1997 del edil del PP Miguel Ángel Blanco. Los etarras, al ser preguntados sobre si iban a declarar, afirmaron en euskera que no iban a responder y siguieron hablando despreocupadamente entre sí.A pesar de ello, el fiscal y el abogado de la Asociación de Víctimas del Terrorismo les formularon, entre otras, estas preguntas: «¿Dispararon en la nuca a Miguel Ángel Blanco Garrido? ¿Es cierto que tras el primer disparo efectuaron un segundo disparo para confirmar su muerte?». Los etarras, que permanecieron mudos ante estas preguntas, se enfrentan a una petición de 50 años de cárcel.

El primer testigo, la madre de Blanco, Soledad Garrido, no quiso ver la cara a los terroristas, por lo que se bajaron las persianas, y dijo que «su hijo se llevaba bien con todo el mundo» y que «sólo había tenido enfrentamientos con gente de HB, aunque no tomaba precauciones».

Un total de 300 personas se concentraron en la Audiencia para acompañar a la familia de Blanco, convocados por las Nuevas Generaciones del PP y por el Foro de Ermua.

Ibarretxe pide perdón a las víctimas

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, lamentó ayer en una carta enviada con motivo del 19 aniversario del atentado de Hipercor, en Barcelona, «la soledad» de las víctimas ante «el dolor por la pérdida de seres queridos» y les pide perdón por la «lejanía» de los poderes públicos. Su partido, el PNV, anunció ayer que se reunirá esta semana con Batasuna, una cita «discreta, no secreta». Por otra parte, el presidente Zapatero podría anunciar esta misma semana su intención de comenzar el diálogo con ETA. Lo hará en el Congreso, pero con una simple comunicación verbal.

Dos históricos de ETA

Francisco Javier Gaztelu, ‘Txapote’

Fue el dirigente del aparato militar de ETA desde 1999 hasta su detención en febrero de 2001 y miembro del comando Donosti.

Presuntamente, es el asesino material del que fuera edil del PP en Ermua, Miguel Ángel Blanco.

Irantzu Gallastegi, ‘Amaia’

Fue miembro del comando Donosti de ETA y también está implicada presuntamente en el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco. Es compañera sentimental de Txapote y tienen un hijo en común, de tres años.

Los dos días que forjaron el espíritu de Ermua

10 de julio de 1997

Secuestro de Miguel Ángel Blanco. La organización terrorista ETA secuestró al concejal del PP de Ermua, de 29 años. ETA exigió al Gobierno el acercamiento de los presos para no asesinar al secuestrado.

11 de julio de 1997

Manifestaciones en toda España. Decenas de miles de personas se manifiestan por todo el país para exigir a la banda armada que no mate al concejal del PP.

12 de julio de 1997. 12.00 h

En  masa a las calles. Cuatro horas antes de que se cumpliera el ultimátum, España vuelve a echarse a la calle: más de medio millón de personas se manifestaron en Bilbao. Los periódicos y las televisiones cambiaron sus logotipos por el lazo azul, símbolo de la lucha contra ETA.

12 de julio de 1997. 16.50 h

Dos tiros en la nuca. El Gobierno de José María Aznar no cedió a las condiciones de ETA, y los miembros de la banda armada pegaron dos tiros en la nuca a Blanco, que murió en el hospital horas después.

14 de julio de 1997

Cansados de violencia. Los españoles vuelven a concentrarse contra ETA otra vez: más de un millón de personas en Madrid, para protestar por el brutal asesinato. La periodista Victoria Prego leyó un manifiesto acordado por todas las fuerzas políticas. La prensa internacional también denunció esta muerte.

13 de febrero de 1998

Nace el foro de Ermua. El movimiento cívico del Espíritu de Ermua se materializó en el Foro de Ermua, creado por profesores universitarios, profesionales y ciudadanos vascos. El asesinato a sangre fría de Miguel Ángel Blanco marcó un antes y un después en el movimiento de rechazo de la sociedad en contra de la organización terrorista ETA.

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