Agentes de la Comisaría de la Policía Nacional de Miranda de Ebro detuvieron a un varón de 49 años, D.D.S.L, como presunto autor de un delito de tráfico de drogas, tras ocuparle en la estación de trenes de la localidad un total de 180 gramos de cocaína y 12.000 euros, según informaron a Europa Press fuentes de la Subdelegación del Gobierno.

El presunto delincuente estaba requisitoriado por la Policía Autonómica de Cataluña, que le buscaba por su posible relación con el tráfico de droga.

En el registro de las pertenencias en Comisaría, los policías descubrieron que en la maleta llevaba una bolsa de plástico enrollada con cinta de embalaje y que en el interior había una sustancia pulverulenta de color marrón.

Los agentes tomaron una muestra del producto y comprobaron que se trataba de heroína, con un peso que superaba los 180 gramos. En el cacheo personal, al detenido le intervinieron más de 12.000 euros, presumiblemente vinculados a su actividad de tráfico de estupefacientes.

Las investigaciones posteriores han permitido saber que el detenido trabajaba como camionero para una empresa frutícola de Murcia, y en su ruta semanal desde esa localidad realizaba entregas en Alemania y Holanda.

El detenido aprovechaba los viajes de retorno para introducir droga en España, contando con puntos de entrega en Barcelona, (aprovechando áreas de descanso y de servicio, e incluso llegando hasta Portugal.

Como en la actualidad estaba de baja laboral y no contaba con camión, decidió coger el tren para desplazarse a sus puntos de venta, esta vez en el sur de Francia.