La izquierda abertzale (IA) ha calificado de "atropello judicial" la imputación al representante del movimiento de oposición al Tren de Alta Velocidad (TAV) Mugitu, Mikel Álvarez, por el lanzamiento de dos tartas a la presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, el pasado 27 de octubre en Toulouse (Francia).

En un comunicado, la izquierda abertzale, ante la declaración prestada este jueves por este donostiarra en la Audiencia Nacional (AN), le han trasladado su "apoyo y solidaridad", tanto a él como al resto de encausados en este procedimiento judicial.

"Que un hecho como el lanzamiento de tartas a una personalidad pública termine con una petición de varios años de cárcel y enmarcada en un delito de terrorismo, solamente es comprensible desde la óptica represiva que se aplica desde Madrid a lo que en Euskal Herria acontece", ha opinado.

Además, la izquierda abertzale ha considerado que esta imputación es "un capítulo más en la pretensión de criminalizar y paralizar al amplio movimiento social que se opone a la construcción del TAV".

A su juicio, "quienes pretenden imponer este proyecto inviable desde un punto de vista económico, social y ecológico, mejor harían en atender las demandas de amplios sectores de la sociedad, en vez de obcecarse en silenciar su voz".