Doymo, la empresa encargada de redactar el Plan de Movilidad en Huesca, dispondrá en abril de las conclusiones del estudio que están llevando a cabo a través de encuestas a los oscenses, primero telefónicamente y, ahora, a pie de calle.

El resultado de este estudio permitirá realizar el primer diagnóstico, a partir del que podrán comenzar a definirse las medidas correctoras más apropiadas. Será en junio cuando esté listo el plan de movilidad y sólo quede ejecutarlo.

En concreto, se realizarán 200 encuestas telefónicas y en las próximas semanas, hasta el 12 de marzo, prevén hacer unas mil encuestas directas, a viandantes, conductores y usuarios del transporte público. Esas encuestas les permitirán conocer los movimientos de los oscenses, su percepción de la movilidad en la ciudad o si consideran positiva una peatonalización.

El director de proyectos de Doymo, Manuel Pineda, ha explicado que "hay preguntas del tipo objetivo, saber de dónde vienen y adónde va la gente para ver los itinerarios principales, y luego también temas de opinión y percepción como, por ejemplo, que valoren la movilidad actual en la ciudad o si la oferta de carril bici es suficiente, si consideran que la peatonalización puede ser positiva y hay preguntas abiertas para que propongan o indiquen sus preferencias".

Tanto miembros del gobierno municipal como el director de proyectos de Doymo coinciden en señalar el exceso de tráfico como el principal problema en la ciudad.

"Igual hay demasiado ruido y demasiados coches para una ciudad de 50.000 habitantes. Por ejemplo, en el Coso Bajo no es agradable pasear. Por ello, también incluimos mediciones de ruido para valorar la calidad del entorno", ha añadido Manuel Pineda.