Cuatro organizaciones suscriben un manifiesto contra la incineración de los residuos urbanos

Las organizaciones Acció Ecologista-Agró y Ecologistas en Acción más los sindicatos CCOO PV y UGT PV han suscrito un manifiesto contra la incineración de los residuos urbanos, según han informado en un comunicado, en el que ha considerado que la administración "debe iniciar sin demora campañas informativas, formativas y de sensibilización, que contribuyan a una reducción en la producción de residuos y a una mejor separación en origen".

Las organizaciones Acció Ecologista-Agró y Ecologistas en Acción más los sindicatos

Ccoo pv y

Ugt pv han suscrito un manifiesto contra la incineración de los residuos urbanos, según han informado en un comunicado, en el que ha considerado que la administración "debe iniciar sin demora campañas informativas, formativas y de sensibilización, que contribuyan a una reducción en la producción de residuos y a una mejor separación en origen".

En su opinión, "la incineración no solo aumenta el riesgo de contaminación sino que funciona como un inhibidor de la recuperación de materiales" porque se piensa que "si se pueden quemar, para qué separar". Según las organizaciones, "garantizar los objetivos de reducción en la generación de residuos requiere un esfuerzo de consenso entre empresas y entidades sociales, con medios para conocer y proponer actuaciones a la administración".

Las entidades denuncian el "incumplimiento" de la Ley de residuos valenciana de 2000 "por no constituir la Entidad de Residuos que, según la propia Ley, dispondría de importante capacidad ejecutiva y sería el punto de encuentro de las administraciones y los agentes sociales y económicos".

A su juicio, "la alternativa que propone el Consell es inaceptable" y exigen que la revisión en marcha del Plan Integral de Residuos "tenga como objetivos la reducción en el volumen de residuos producidos, la mejora del reciclaje, con la instalación de contenedores específicos para la materia orgánica, la mejora del rendimiento en la recuperación de materiales de las actuales plantas de tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos y la reducción del rechazo, como mínimo al 44 por ciento".

Las organizaciones sostienen que una acción "decidida y consensuada en estos términos hará innecesaria la incineración". Según las organizaciones, con la reciente propuesta de la Conselleria de Infraestructuras y Medio Ambiente de "quemar" el supuesto rechazo de las plantas de tratamiento en las cementeras se asiste al "enésimo episodio" de una "mala gestión" y han añadido que el "retraso" en la construcción de las instalaciones de tratamiento adecuadas "ha causado graves trastornos a nuestro medio ambiente y molestias a muchos valencianos".

Además, han apuntado que "miles de toneladas de residuos han circulado por nuestra geografía y más allá, en busca de un sitio donde ser depositados, incumpliendo el principio de tratar los residuos lo más cerca posible a donde se generan" y han recalcado que existen "varios planes zonales pendientes del necesario consenso con la población para construir la oportuna planta de tratamiento en la ubicación adecuada".

Antigüedad de las plantas

Las cuatro entidades han destacado que la "mala gestión" del Consell "se extiende también a la antigüedad de las instalaciones, al bajo rendimiento de las plantas en la recuperación de materiales y a la sobresaturación".

Según estas entidades, "han estado depositando en el vertedero el 70 por ciento de los residuos que tratan, incumpliendo la norma del Consell que fija en el 44 por ciento el máximo de rechazo a depositar en vertedero e incumpliendo igualmente la ley estatal de Residuos, que fija un objetivo de reciclaje superior al 50 por ciento".

Las organizaciones han remarcado que el Consell "incumple su propia normativa y en lugar de trabajar por un mejor reciclaje nos propone quemar (o valorizar como le denominan) el rechazo de las plantas de tratamiento en las cementeras".

De esta forma, han criticado que no se recuperan "materiales útiles para la actividad económica, no se fabrica un buen compost útil para la agricultura y para la mejora de suelos pobres en materia orgánica, pero sí se aumentan las tasas a los vecinos desde un 20 por ciento como mínimo hasta un 200 por ciento o más". "En lugar de contribuir a la mejora de la actividad económica y el trabajo, se aumenta el riesgo para la salud debido a las emisiones contaminantes asociadas a la incineración", han indicado.

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