Amibil recibe la ayuda de CAI para construir una residencia destinada a personas con discapacidad intelectual

La Asociación de Minusválidos de Calatayud (Amibil) ha recibido la ayuda de la Obra Social de Caja Inmaculada (CAI) para iniciar los trámites de construcción de la Unidad de Atención Residencial dirigida a personas con discapacidad intelectual de Calatayud y su comarca.
María González, Directora De La Obra Social De La CAI, En Amibil
María González, Directora De La Obra Social De La CAI, En Amibil
CAI
María González, Directora De La Obra Social De La CAI, En Amibil

La Asociación de Minusválidos de Calatayud (Amibil) ha recibido la ayuda de la Obra Social de Caja Inmaculada (CAI) para iniciar los trámites de construcción de la Unidad de Atención Residencial dirigida a personas con discapacidad intelectual de Calatayud y su comarca.

En concreto, la Obra Social de la CAI aportará parte del coste de redacción del proyecto básico y de ejecución del centro asistencial, requisito necesario para solicitar otros apoyos institucionales, ha informado la entidad financiera en un comunicado.

Hasta el momento, el proyecto cuenta con el respaldo del Ayuntamiento y Comarca de Calatayud, Diputación Provincla de Zaragoza y el programa europeo Leader.

La construcción de la residencia se realizará sobre un terreno de 1.430 metros cuadrados cedido por el Ayuntamiento de Calatayud, que está situado junto al actual Centro de Atención y Recursos de Amibil, construido en 2005.

Dispondrá de 50 plazas distribuidas en tres módulos: uno de ellos de apartamentos para personas con discapacidad intelectual ligera-media, con capacidad para 32 personas; otro módulo con doce plazas para personas con discapacidad severa-profunda; y un tercer espacio con seis plazas para mayores con discapacidad que necesiten una atención propia.

Con este recurso, la asociación cubrirá de manera integral todos los aspectos que las familias y las personas con discapacidad intelectual de Calatayud y comarca necesitan, han apuntado las mismas fuentes.

Actualmente, muchas de estas personas se ven obligadas a dejar su entorno social y familiar y trasladar su residencia a Zaragoza por falta de centros de atención especializados en la zona, han agregado desde la CAI.

Esta ayuda refuerza la colaboración que la Obra Social de CAI y Amibil mantienen desde principios de 2000. En 2004, CAI destinó 30.000 euros para facilitar un vehículo adaptado y facilitar el traslado de las personas con discapacidad intelectual de la zona.

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