El presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar Blanco, ha celebrado este martes la "buenísima y grandísima" elección del también ourensano Miguel Santalices, afín al sector 'baltarista' en el PPdeG, como vicepresidente primero del Parlamento, puesto en el que le sustituye y en el que, ha augurado, hará "un gran papel" al servicio de las "necesidades" de Galicia.

Baltar Blanco, quien acudió a la toma de posesión de Miguel Santalices, ha rechazado hablar de "cuotas" y ha insistido en que Miguel Santalices lo hará tan bien en la Vicepresidencia como lo haría cualquier otro diputado del Grupo Parlamentario Popular.

Por su parte, el también presidente del PP ourensano ha señalado que él ya no está en el grupo y que se enteró este lunes del nombramiento, cuando lo hizo público el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy Fraga.

Del mismo modo, ha rechazado las críticas a una "sucesión hereditaria" en la Diputación ourensana, al frente de la cual sustituyó a su padre, José Luis Baltar Pumar, y ha insistido en que dicha figura "no está regulada en ninguna normativa".

"Es una interpretación que se hace porque parece ser que vende hablar de este asunto", ha esgrimido, para recordar que él es el presidente provincial del PP, que lo apoyaron todos los diputados de su grupo en la institución provincial y que "no vio" que nadie propusiese "un nombre" alternativo al suyo.

"absoluta normalidad democrática"

Así las cosas, Baltar Blanco ha insistido en que hay que ver esta situación en el marco de "una absoluta normalidad democrática" y ha rechazado que el relevo en la Diputación ourensana vaya a suponer un mayor desapego de la ciudadanía hacia la política.

"Los ciudadanos tienen que pensar en cosas mucho más importantes", ha replicado, antes de ejemplificar con el desempleo, y ha aludido a los resultados electorales que avalan al PP en su provincia. "Eso no habla de desapego, sino de identificación y cercanía con los ciudadanos", ha zanjado.