La Fiscalía del Principado de Asturias ha solicitado una condena de un año y tres meses de prisión y privación del derecho a conducir vehículos de motor durante tres años y seis meses para un conductor que arrolló a cuatro personas, entre ellos una niña de cuatro años, en Grado en el mes de abril de 2009.

El conductor, R. Á. R., nacido en 1976, dio positivo en el control de alcoholemia que se le practicó tras el accidente. La vista oral se celebrará este martes, 14 de febrero, en el Juzgado de lo Penal número cuatro de Oviedo, a las 11.30 horas.

El fiscal sostiene que sobre las 17.50 horas del 9 de abril de 2009, el acusado circulaba por las calles de Grado a bordo de un vehículo prestado marca Chrysler, con sus facultades físicas y psíquicas mermadas por el alcohol que había ingerido previamente, y a velocidad "notablemente excesiva" para el casco urbano, limitado a 50 kilómetros por hora.

Al llegar a la calle Díaz Miranda, limitada a 40 kilómetros por hora, a la altura del número 34, a la salida de una curva con giro a la izquierda con ligera pendiente ascendente y frente a una intersección, el acusado perdió el control del turismo, que se salió de la calzada y colisionó contra los vehículos que estaban estacionados en el margen derecho según su sentido de circulación. Con el impacto, éstos fueron desplazados a su vez, hasta atropellar a cuatro peatones que se encontraban en el lugar.

La Policía Local de Grado observó que el acusado presentaba halitosis etílica, deambulación oscilante, habla pastosa y ojos enrojecidos y brillantes con pérdida de atención, por lo que le practicó la prueba de alcoholemia con el etilómetro de precisión Dräger 7110. A las 19.15 horas, el acusado presentó una proporción de 0,54 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, y a las 19.50 horas una proporción de 0,50 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, que no deseó contrastar con análisis médicos.

Posteriormente, a las 23 horas, los agentes hicieron constar en las diligencias los síntomas externos que presentaba el acusado, como olor a alcohol en la ropa, rostro pálido, ojos brillantes, pupilas dilatadas, comportamiento con locuacidad extrema y nervioso, habla pastosa, fuerte olor a alcohol en el aliento, repetición de frases o ideas y movimiento oscilante.

A consecuencia de los hechos resultaron heridas de diversa consideración una menor de cuatro años y su padre, de 31; y otras tres personas de 66, 23 y 28 años.

Además, resultaron con daños tres vehículos, que se encontraban estacionados en el margen derecho de la calle, uno de ellos por importe de 6.273 euros. Los propietarios de los otros dos han renunciado a cualquier indemnización que pudiera corresponderles.

Asimismo se ocasionaron daños en el número 34 de la calle Díaz Miranda, en la puerta del mesón La Fuente por importe de 325 euros, y en una valla propiedad del Ayuntamiento de Grado, por valor de 1.032 euros.

La Fiscalía considera al acusado responsable de un delito contra la seguridad vial del artículo 379.2, un delito contra la seguridad vial del artículo 380.1 (conducir con temeridad manifiesta y poniendo en peligro la vida o integridad de las personas) y tres delitos de lesiones por imprudencia grave del artículo 152 (apartados 1.1 y 2), en relación con el artículo 147.1, siendo de aplicación lo dispuesto en los artículos 382 y 77, todos ellos del Código Penal.

En concepto de responsabilidad civil, la Fiscalía solicita que se condene al acusado a pagar indemnizaciones que suman 17.614,41 euros -sin contar el coste de la atención sanitaria a los lesionados, que se determinará en ejecución de sentencia-, con responsabilidad civil directa de la compañía aseguradora del coche -Allianz- y responsabilidad civil subsidiaria del propietario del vehículo.