La Obra Social de CAI dona 14.000 euros al Banco de Alimentos de Aragón

La Obra Social de Caja Inmaculada (CAI) ha donado un total de 14.200 euros a la Fundación Banco de Alimentos de Aragón para que pueda hacer frente a sus actuales necesidades económicas y continuar su labor al servicio de las personas en situación de pobreza y de exclusión social.
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CHUS MARCHADOR
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La Obra Social de Caja Inmaculada (CAI) ha donado un total de 14.200 euros a la Fundación Banco de Alimentos de Aragón para que pueda hacer frente a sus actuales necesidades económicas y continuar su labor al servicio de las personas en situación de pobreza y de exclusión social.

El apoyo de la Obra Social de CAI se produce en un momento especialmente importante para el Banco de Alimentos de Aragón porque necesita con urgencia recursos para atender el fuerte incremento de solicitudes de ayuda que está recibiendo de las entidades y servicios sociales.

El presidente del Banco de Alimentos de Aragón, Antonio Tomás, ha explicado que "la crisis económica está agravando la situación de muchas personas y familias, que tienen que acudir a centros benéficos en busca de comida".

Ha agregado que "para atender la demanda de los centros estamos redoblando esfuerzos, lo que hace que nuestras necesidades de tesorería para cubrir gastos básicos, como transporte, combustible o teléfono, estén aumentando considerablemente. Por este motivo, la ayuda de la Obra Social de CAI es clave para que podamos seguir trabajando".

Este donativo refuerza la colaboración que ambas instituciones mantienen desde 1995, año en que se creó el Banco de Alimentos de Aragón. De hecho, la Obra Social de CAI facilitó a la Fundación el primer local que utilizó para realizar su trabajo, en el Paseo de la Ribera de Zaragoza, y la primera furgoneta para el transporte de alimentos.

Desde entonces, el apoyo ha sido constante, han subrayado desde la Obra Social, lo que ha permitido al banco desarrollar en condiciones adecuadas su actividad. En 2010, Caja Inmaculada rehabilitó parte de sus actuales instalaciones de Mercazaragoza.

La actividad de la Fundación Banco de Alimentos de Aragón se mantiene gracias a la colaboración de un numeroso grupo de voluntarios que se encargan de recoger alimentos en perfectas condiciones de consumo y distribuirlos entre entidades que atienden a las personas más necesitadas. Los alimentos provienen principalmente de empresas del sector, grandes superficies y colectas organizadas en centros públicos, centros de enseñanza, otras empresas y particulares.

En 2011, el Banco de Alimentos de Aragón incrementó el reparto de alimentos un 36 por ciento respecto a 2010 y atendió a más de 19.000 personas a través de 195 entidades asistenciales. En total, recibió y distribuyó 1.628.000 kilos de alimentos.

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