El cantautor venezolano Carlos Baute y su compatriota Astrid Klisans dirán el "sí quiero" en el monasterio de El Escorial el próximo 29 de junio, tras lo cual planean un "rumbón" con amigos como Melendi, Franco de Vita, Rosario Flores y Marta Sánchez, según dijo Baute en una entrevista.

A los invitados, cuya lista ya va por los 750 nombres "y no para de crecer", el autor del éxito Colgando en tus manos les prepara música en vivo hasta las siete de la mañana y después, para los que aguanten bajo el sol veraniego de la sierra de Madrid, un pinchadiscos.

"Va a ser muy divertido, muy emotivo, con muchos amigos" de toda América y hasta familiares de Klisans que llegarán de Australia, explicó muy animado Baute en Quito, donde este viernes participó en un concierto del también venezolano De Vita, que recorre América con su gira Mirar Más Allá.

De hecho, ha aprovechado su estancia juntos en la capital ecuatoriana para intentar convencer a De Vita de que tiene que ir con frac a la ceremonia, porque será testigo, relató Baute entre risas.

El intérprete y Klisans se casaron por lo civil en junio en Letonia, de donde es originaria la familia de la venezolana, pero por su intenso trabajo no tuvieron una luna de miel "en condiciones" y les faltaba una gran fiesta, por lo que decidieron realizar la boda religiosa en España, explicó Baute.

El cantautor dice haber visitado una treintena de veces El Escorial, un enorme monasterio en forma de parrilla encargado por el rey Felipe II en el siglo XVI, el cual también fascina a su esposa, que es arquitecta.

"Nunca me imaginé llegar a casarme allí, así que va a ser hermoso", dijo Baute, cuyo último álbum, Amarte Bien, es un disco dedicado por entero al amor que siente por su mujer, según confesó. "A todas las cosas que yo le dije a ella simplemente le puse música", explicó.

Baute tendrá que preparar la boda a distancia, pues este sábado ha partido hacia Argentina, donde se quedará hasta junio.

Enemigo de las telenovelas, pero "fanático" de comedias españolas como Aída, Aquí no hay quien viva y Mis adorables vecinos, en la que interpretó a un personaje secundario durante una temporada, Baute asumirá un nuevo papel en la serie argentina Los Únicos, que narra las peripecias de unos detectives con superpoderes.

Al cantautor le habían asignado inicialmente una visión y un oído súper, algo que le complacía mucho, pero lamentó revelar que se lo han cambiado. No quiso dar pistas sobre su personaje, aunque enfatizó: "No voy a ser yo, voy a tratar de cambiarlo completamente". Baute se mostró muy animado con el proyecto, pero recalcó que lo hace "por diversión" y que lo suyo es la música.

Por ello, entre rodaje y rodaje, hará una gira por Chile, Uruguay, Paraguay, Bolivia y posiblemente vuelva a fin de año a Ecuador, que esta semana visitó por primera vez, además de tocar en Argentina.

En la gira no se separará de su teclado, su guitarra y su ordenador, porque es en los hoteles donde ha compuesto la mayoría de sus temas, según afirmó.

Afincado en España desde 2000, Baute dice estar acostumbrado a la fama y ser capaz de hacer "una vida completamente normal", como ir al mercado para comprar pescado y verdura frescos.

También es asiduo al Parque de El Retiro, en el centro de Madrid, a jugar al fútbol e ir en bicicleta por las avenidas de la capital española.

Su mayor éxito hasta ahora ha sido Colgando en tus manos, cantado a dúo con la española Marta Sánchez y cuyo videoclip ha sido visto más de 100 millones de veces en la página de internet YouTube.

Baute le propuso el proyecto inicialmente a Rosario Flores, pero esta lo rechazó por su agenda de trabajo y ahora se arrepiente, según relató.

El intérprete reconoció que su mercado "natural" es Latinoamérica, al ser venezolano, pero sus letras de amor primero capturaron las ondas de radio en España y de ahí saltaron al otro lado del océano. "Yo le agradezco mi internacionalización a España", dijo.

Baute opinó que es cuestión de suerte dar con una canción que sea un boom, pero "el mantenerte es lo complicado", dijo. Esa es su meta ahora, a través de sus inextinguibles declaraciones de amor cantadas.