La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha anunciado este jueves una Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia de Género, que en los últimos años ha supuesto la muerte de casi 700 mujeres.

La estrategia incluirá, entre otras medidas, la creación de una comisión interministerial y una red de voluntarios.

Mato se ha expresado así en su primera comparecencia en la Comisión de Igualdad del Congreso, en la que ha asegurado que las mujeres "deben saber que no están solas" y que toda la sociedad va a estar con ellas, y ha propuesto que los dispositivos GPS para maltratadores "se puedan instalar también en las dependencias policiales".

"Ellas van a ser las destinatarias de nuestros esfuerzos", ha señalado la ministra, quien ha reconocido que a lo largo de los años "se ha recorrido un trecho muy importante" para acabar con la violencia de género.

La Estrategia anunciada por la ministra contemplará evaluaciones anuales y medidas en torno a cuatro ámbitos de actuación: la coordinación interinstitucional, políticas de sensibilización y prevención, así como de reducción del riesgo de la violencia, y de asistencia y acompañamiento para la integración de las víctimas.

Incluirá, como ya anunció en su comparecencia en la Comisión de Sanidad la pasada semana, un plan personalizado de atención a las víctimas con el objetivo de hacer un seguimiento de su situación y ofrecerles todos los recursos a su disposición "y así aumentar su confianza en el valor de la denuncia".

Ha señalado que garantizarán una atención integral y especializada a los menores "que son víctimas de maltrato": "Queremos que las necesidades específicas de estos menores estén presentes en todas las medidas y actuaciones que se lleven a cabo", ha dicho.

Creará una red nacional para potenciar las unidades de coordinación y de violencia dependientes de las Delegaciones de Gobierno en las comunidades autónomas, provincias e islas. Esta red hará un seguimiento personalizado de cada situación de violencia en colaboración con las administraciones autonómicas y locales y en relación con cada caso se realizará un seguimiento de los agresores.

Se duplicará el personal de las unidades de violencia de género y se pondrá en marcha una comisión interministerial junto a los ministerios de Justicia, Interior y Empleo y Seguridad Social para evitar la descoordinación y promover el funcionamiento conjunto de las bases de datos.

Entre otros, trabajarán para reforzar con el Consejo General del Poder Judicial y la Fiscalía la eficacia de los dispositivos en el caso de medidas de alejamiento.

Asimismo, fomentará reformas procesales, penales y competenciales en aspectos como la demarcación y planta judicial y los juzgados de violencia sobre la mujer.

Mato ha señalado que también quiere detectar de forma precoz los casos de violencia para que cuando "no haya parte de sanidad pero existan sospechas fundadas se comunique a la Fiscalía para que pueda investigar y, en su caso, interponer la denuncia".

También impulsará contactos con las administraciones competentes para optimizar los recursos disponibles y se creará una red de voluntarios porque, ha dicho Mato, "hay muchas personas dispuestas a ofrecer su tiempo y solidaridad a estas mujeres y a su hijos y a convertirse en un apoyo humano más".

Mato ha adelantado que el Ministerio hará un estudio y una evaluación de los programas de reeducación a maltratadores, en colaboración con instituciones penitenciarias.