El Servicio de Estudios de BBVA pronostica para Andalucía una caída del 1,8 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) para 2012 en Andalucía, pero prevé una recuperación de la economía andaluza en 2013 con un crecimiento del 0,3 por ciento, según el estudio 'Situación España' publicado este miércoles.

Segun dicho estudio, consultado por Europa Press, para 2011, BBVA apunta un crecimiento del PIB del 0,1 por ciento.

Asimismo, entre los factores que condicionan negativamente las diferencias de crecimiento regional en 2012, en el caso andaluz estos factores negativos son "el apalancamiento del sector privado, la tasa de desempleo y el PIB per capita relativo", según el informe.

A nivel nacional, este estudio apunta una caída del 1,3 por ciento del PIB para este año, pero prevé una recuperación de la economía española en 2013 con un crecimiento del 0,6 por ciento.

Así, sostiene que la mayor contracción de la economía llegará entre el primer y el tercer trimestre del año, siendo el periodo comprendido entre abril y junio el "peor" por el efecto "retardado" de las medidas de consolidación fiscal.

En cuanto al mercado de trabajo, la entidad financiera estima que la tasa de paro escalará hasta el 24,4 por ciento en 2012 y repuntará al 24,6 por ciento en 2013, a pesar del ligero crecimiento del PIB que prevé BBVA para el próximo año.

Sobre la evolución del déficit, indica que este año cerrará en el 5,3 por ciento, casi un punto por encima que la previsión del Gobierno (4,4 por ciento), pero prevé que en 2013 cumpla la estimación oficial y cierre en el tres por ciento del PIB. La deuda pública, por su parte, se situará en el 72,5 por ciento del PIB este año y en el 74,4 por ciento el próximo.

BBVA considera que las medidas de ajuste fiscal adoptadas por el Gobierno son "creíbles", tanto por el lado del aumento de la recaudación como por el recorte del gasto, aunque apunta que para alcanzar la previsión del Ejecutivo sería necesario que el PIB creciera este año un punto porcentual.

Para la entidad financiera, cualquier déficit menor al seis por ciento implica un esfuerzo "mayor" al previsto en el Programa de Estabilidad, e insiste en que el tamaño del ajuste que se planea en España es "prácticamente inédito" en países desarrollados.