Una joven que asegura haber sido víctima de una agresión sexual múltiple cuando tenía 17 años, en un descampado cercano al cementerio de Carabanchel en 2005, ha reconocido este martes que exageró y mintió en sus primeras declaraciones para resultar creíble porque tenía miedo de que los tres acusados pudieran hacerle daño.

"Mentí porque tenía miedo a que me hicieran algo (...). Inventé y exageré", ha asegurado la joven en la primera sesión del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Madrid a Sergio B.G., Felipe B.G. y Roberto Carlos D.B., para quienes la Fiscalía solicita en sus conclusiones provisionales penas de entre dieciocho años y veintitrés años de prisión.

En su declaración, la supuesta víctima ha mantenido que el 26 de enero de 2005 fue violada por dos de los acusados y ha dicho que durante la agresión solo quería que terminaran y la dejaran en paz y que no la golpearan o le hicieran más daño. Además, y a pesar de que ese día llevaba su teléfono móvil, ha explicado que no se atrevió a utilizarlo para pedir socorro porque los acusados le dijeron que lo apagara y temía que le dieran una paliza.

Por su parte, Sergio B.G. ha admitido que se puso en contacto con la joven, a la que ya conocía, con la intención de ir a cenar con ella, pero ha añadido que fue ésta quien le propuso "hacer un trío". Mientras tanto, Felipe B.G. ha reconocido que mantuvo relaciones sexuales con la denunciante, aunque ha manifestado que ella fue "la parte activa", sin oponerse en ningún momento.

Por último, Roberto Carlos D.B. ha señalado que la chica le propuso mantener relaciones sexuales, pero que él se negó, y ha agregado que la joven "miente en todo" por temor a su padre, que la amenazó por teléfono esa misma noche.

Los hechos, según el escrito de conclusiones provisionales del fiscal, tuvieron lugar cuando Sergio se puso de acuerdo con Felipe y Roberto Carlos para llamar a la joven por teléfono y citarla cerca de la discoteca "Ministry" de la localidad de Getafe.

Sin temor alguno, ya que Sergio era conocido suyo, la víctima se montó en un coche con los tres procesados, que la llevaron a un descampado cercano al cementerio de Carabanchel donde no había nadie y le dijeron que eligiera a uno para mantener relaciones sexuales.

La joven -continúa el fiscal- se negó, pero fue agredida sexualmente por dos de los acusados y, a consecuencia de los hechos, sufre estrés postraumático, trastornos del sueño, inseguridad y malestar psicológico.

El Ministerio Público solicita 14 años de prisión para Sergio y para Felipe como autores de un delito de agresión sexual y 9 años más como cooperadores necesarios en otro, mientras que para Roberto Carlos pide dos penas de 9 años de cárcel como cooperador necesario en otros tantos delitos de agresión sexual.