El empresario Carlos Sánchez, acusado en el caso 'Malaya', ha asegurado este martes que "nunca" tuvo sociedades con el presunto cerebro de la supuesta trama de corrupción en Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, y que no conocía a nadie del Ayuntamiento marbellí, desvinculándose de operaciones y negocios con el principal procesado, en las que supuestamente participaron sociedades a las que la investigación le vincula.

La Fiscalía Anticorrupción acusa a Sánchez de un delito de cohecho activo continuado por supuestos pagos —de más de seis millones de euros— relacionados con varias promociones, otro de blanqueo de capitales por compraventas y también por dos delitos de malversación, como cooperador necesario, por dos permutas. En total, solicita 22 años de prisión y 23 millones de euros de multa, según el escrito provisional del fiscal.

El acusado ha dicho en su declaración que no reconoce los pagos que se vinculan a él que están anotados en los archivos informáticos intervenidos en la investigación, asegurando que esas anotaciones "no tienen contenido y empiezo a pensar que son dudosas" y lamentando que "veo que van a sentar cátedra". Además, ha insistido en que no conoce detalles de las operaciones de compra, venta o permutas de terrenos investigadas.

El fiscal le ha preguntado si da verosimilitud a las anotaciones sobre pagos al principal acusado de 315 millones de las antiguas pesetas por tres operaciones, parte de esa cantidad en cuadros, respondiendo que no sabe nada respecto al dinero y que los cuadros eran suyos y sólo hizo un intercambio de un cuadro por un caballo a través de otro de los acusados que era conocido suyo desde hacía muchos años, Óscar Benavente, sabiendo que Roca estaba detrás.

Sánchez ha señalado que conoció a Roca por una operación en Murcia en 1978, pero en 1993 o 1994 "rompo relaciones" con él por un problema en otro negocio. Ha apuntado que desde esa fecha "estoy desvinculado de Marbella" porque "discuto con el señor Roca" y ha señalado que hasta 2002 o 2003 "no teníamos ningún trato", al tener "caracteres distintos y forma de pensar distinta". "No he ido de comparsa", ha apuntado.

"No he estado en el Ayuntamiento nunca, no conozco a nadie allí y no he conocido al señor Jesús Gil nunca, por filosofía, por concepto y por personalidad distinta", ha aseverado y ha apuntado, respecto a Julián Muñoz, que lo conoció antes de ser alcalde, pero "jamás" lo visitó siendo regidor, añadiendo: "cometí el error de dejarle una casa mía para él para pasar unos días y cometió el error de meterme a la compañera sentimental suya y tuve problemas familiares".

En este sentido, Carlos Sánchez ha añadido que no conoce a ningún concejal ni tuvo relación con nadie del Consistorio "ni técnicos, ni aparejadores, ni arquitectos", indicando que a Marbella "vine a veranear y mire, no voy a volver ni a heredar". "Parece que la operación 'Malaya' la he inventado yo, soy el maestro de Roca, aquí y en América", ha apostillado. OPERACIONES

Ha indicado que en la sociedad CCF21, que, según la investigación participa en negocios con el principal acusado o sus sociedades, "no tiene ninguna acción", sino que representó a socios como apoderado, habiendo otros 16 o 17 más. Ha explicado que fue una empresa, en la que su madre y otros familiares sí eran socios, "muy importante" que a raíz del caso 'Malaya' "se ha hundido", apuntando que él participaba en algunas de las operaciones.

No obstante, ha defendido que se tratarían de negocios inmobiliarios de compraventas de parcelas y en la mayoría de los casos "sin licencia", operaciones que en ocasiones "eran rentables", preguntándose si "es un delito ganar dinero". "Los que están ahí detrás —en referencia a empresarios acusados que están en el banquillo— y 250.000 más empleados son los que han hecho este país, no las 35 empresas del IBEX", ha apostillado.

Ha criticado al Ayuntamiento de Marbella, al indicar que "no ha cumplido nada" en cuanto a los acuerdos urbanísticos y "ha engañado a todo el mundo, a todos los que nos hemos arrimado allí, los que hayan ido con unas intenciones o con otras". "Esto parece un montaje para que el Ayuntamiento se salga de rositas", ha apuntado, aludiendo a que el también acusado Andrés Liétor podrá aportar más datos sobre determinados negocios.

De la investigación, ha señalado que vino de República Dominicana para la declaración "que no la admitían", precisando que "en el momento en que llegó el 'tomate', la zanahoria y todas las televisiones, me detuvieron". Sobre su declaración de julio de 2006, ha dicho que la pidió al juez y que quería un careo con Roca, "incluso porque le había dicho muchas cosas de la Junta de Andalucía, que las dije y no se manifiestan ahí. El dinero que se entregó, o se habló o me engañaron o no me engañaron en el hotel Alfonso XIII", ha señalado.

El interrogatorio de Sánchez se ha suspendido para continuar este miércoles, ya que las defensas y las acusaciones han mantenido, en presencia del Tribunal, una reunión para exponer las distintas posturas sobre la deducción de testimonio de la causa principal, relacionadas en su mayoría con convenios o resoluciones urbanísticas concretas; que han dado lugar a procedimientos que se instruyen en los juzgados de Marbella.

Mientras que algunos letrados sostienen que hay duplicidad de causas, la Fiscalía mantiene que no y finalmente, según han indicado a Europa Press fuentes judiciales, no se ha llegado a una postura común entre todas las partes.