La dirección de Teka ha ofrecido este martes al comité de empresa ampliar de 20 a 25 los días de indemnización por año, con un máximo de 12 mensualidades, así como traslados a Portugal que se sumarían a los 25 ya ofrecidos a Turquía, pero en este caso sin cuantificar el número.

Sin embargo, el comité de empresa ha manifestado que "no va a entrar a negociar" si la empresa no deja la fabricación de cocinas en Santander y si "no baja muy mucho el número de personas afectadas por el ERE".

Así lo han señalado, a preguntas de la prensa, el presidente del comité de empresa, Luis Fernández; y los representantes de CSIF y CC.OO., Fernando Mier y Javier García, que han destacado que "la empresa sigue sin moverse" ni en el número de afectados ni en llevarse cocinas, porque insisten en que "la decisión está tomada y es inamovible".

La dirección de Teka ha hecho nuevas ofertas en la mesa de negociación, que se suman a las ya conocidas —traslados a Turquía y prejubilaciones para los mayores de 55 años— y también se ha comprometido a entregar al comité de empresa, antes de este jueves, más información sobre las cuentas de la fábrica santanderina, en concreto un balance de situación y una memoria explicativa.

En este sentido, los miembros del comité están a la espera de que este hecho se produzca, ya que llevan más de un mes esperando dicha documentación, que consideran "necesario" estudiar para "intentar demostrar que las cuentas no son reales", ha señalado Fernández.

Por otro lado, les ha ofrecido nuevos traslados a Portugal, que se suman a los 25 a Turquía que ya están sobre la mesa, aunque en este caso no se ha especificado el número de trabajadores que podrían acogerse a esta opción e irse a trabajar a la factoría del país luso —donde se fabrican campanas extractoras y cocinas—.

A este respecto, Fernández ha hecho hincapié en que los traslados serían con "las condiciones del país de destino", por lo que el comité no cree que la oferta "sea muy viable".

Los representantes del comité han destacado que, pese a las nuevas ofertas de la empresa, su "máximo interés" es el número de trabajadores, ya que la cifra de 198 afectados es "inadmisible" y por lo tanto, mientras este número "no se rebaje", los sindicatos no van a negociar.

"pequeño exceso" de plantilla

Sin embargo, el comité "sí está dispuesto a negociar" en otros aspectos como la reducción de costes o incluso de plantilla, por que, según han admitido, "hay un pequeño exceso" en la fábrica, en donde "se pueden hacer ajustes", aunque el número de trabajadores que el comité contempla es "bastante más bajo" de los 198 incluidos en el ERE.

"A lo que no estamos dispuestos es a que se lleven la sección de cocinas porque vemos que, si se van las cocinas, machacarán la estructura de Santander y el resto de la fábrica no tendría ningún futuro", ha explicado Fernández.

A partir de la próxima semana, las reuniones entre comité y dirección de Teka se intensificarán a dos por semana, que se celebrarán los martes y jueves, a las 9.30 horas, en el hotel Hoyuela.

A este respecto, Mier ha señalado que esperan que en las próximas reuniones la empresa acuda con "otro talante", se muestre "más flexible" y rebaje "sus pretensiones", para así poder "poco a poco avanzar en la negociación".

El representante de CSIF ha indicado que se va a intentar que la línea de fabricación de cocinas se quede en Santander, "si no es en su totalidad, al menos placas de inducción y vitrocerámicas, que sería lo realmente interesante".

Y es que, según ha explicado Mier, las vitrocerámicas y las placas de inducción son las dos líneas de producción en las que "la mano de obra tiene menos incidencia", es decir, que "no tiene una repercusión que llame la atención en el precio final del producto", algo que no ocurre con las cocinas de gas, donde si que tiene incidencia.

Además, Mier ha hecho hincapié en que la multinacional también tiene su propia "estrategia de negociación" y al principio "no va a ofertar una solución". Pero el comité espera que, semana tras semana, "se vayan limando flecos y se intente llegar a un acuerdo antes de que finalice el plazo —que es de 30 días desde que se presentó el ERE—".

Por otro lado, ha destacado el "apoyo" del Gobierno de Cantabria y del presidente, Ignacio Diego, que, tras hablar con ellos este lunes a la entrada del Parlamento, les ha indicado que "va a seguir manteniendo reuniones con la empresa y el comité", ejerciendo como "intermediario entre las dos partes". "A ver si entre todos llegamos a buen puerto, a una solución que satisfaga a las dos partes", ha deseado Mier. MOVILIACIONES

Por el momento, y hasta que la situación no cambie de rumbo, los trabajadores de Teka continuarán con movilizaciones. Este jueves, 9 de febrero, realizarán un paro de 24 horas, y esa misma jornada se manifestarán a partir de las siete de la tarde desde la Plaza de Numancia hasta los Jardines de Pereda, donde se leerá un manifiesto.

En este sentido, Mier ha realizado un llamamiento al apoyo de los ciudadanos de Santander y Cantabria para que la manifestación sea "numerosa" y así se vea que los trabajadores de Teka tienen "un respaldo social importante en la Comunidad Autónoma".

Por su parte, Teka ha señalado en un comunicado que en la reunión de este martes, la primera del periodo legal de consultas del Expediente de Regulación de Empleo, tanto la dirección de la compañía como los representantes de los trabajadores han manifestado "su voluntad de negociar de buena fe, dentro de un marco de respeto y transparencia".

La dirección de Teka Industrial confirma que aportará información económica adicional y estudiará las propuestas que el comité de empresa aporte durante el proceso de negociación. Además, subraya que la compañía ha mejorado su propuesta de plan social.