La Presidencia del Gobierno vasco ha asegurado que su solvencia está "fuera de toda duda" y que es "radicalmente falso" que el Ejecutivo de Patxi López haya dirigido al PNV una "llamada de ayuda desesperada" ante ninguna situación de "emergencia" de las cuentas públicas.

En un comunicado, el Gobierno vasco se ha referido, de esta forma, a las declaraciones del presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, quien ha revelado que su partido ha recibido una llamada "desesperada" de Gobierno vasco para pedirle ayuda con el fin de encontrar soluciones o nuevas vías con las que inyectar recursos extraordinarios "a las vacías arcas gubernamentales".

El Ejecutivo vasco ha asegurado que "la solvencia del Gobierno Vasco está fuera de toda duda, más allá de las dificultades que el estancamiento de la actividad económica está creando a las administraciones públicas, las empresas y las familias".

"La Administración vasca es la que tiene una situación más saneada, la que antes paga a sus proveedores y la que cuenta con una deuda más reducida, como es de público conocimiento", ha reiterado.

Según ha precisado, "lo que el lehendakari y otros miembros de su Gobierno han venido reclamando desde hace mucho tiempo al PNV es colaboración y compromiso para ayudar a afrontar los desafíos de la crisis económicas, abordando los cambios en la fiscalidad y en la lucha contra el fraude necesarios para sostener los servicios públicos y ayudar a nuestra economía".

En ese sentido, ha afirmado que "no deja de sorprender que el presidente del PNV, en lugar de arrimar el hombro y asumir sus responsabilidades con nuestro país, se dedique a la manipulación, a crear alarmismo y, en definitiva, a empañar gratuitamente la imagen de Euskadi en estos momentos".

A su juicio, este comportamiento "retrata el talante del PNV y de su presidente y revela que no dudan en anteponer sus intereses partidistas a los de la sociedad vasca".

Por último, desde la Presidencia del Ejecutivo vasco han subrayado que "la supuesta situación de 'quiebra inminente' del Gobierno vasco, casa mal con el hecho de que hoy mismo haya concedido a las Diputaciones Forales un aplazamiento de pago por importe de 310 millones con cargo a la primera aportación del año".