Un 68 por ciento de los ciudadanos vascos es optimista en relación al final de ETA y, por primera vez, la población que confía en la sinceridad de la banda para poner fin a la violencia y de la izquierda abertzale para aceptar "las reglas de juego democrático" son mayoría, con porcentajes del 46 y 50 por ciento, respectivamente, según los datos recogidos en el último Euskobarómetro.

En total, se ha realizado 1.200 entrevistas en sus domicilios a mayores de 18 años, 400 en cada territorio histórico de la Comunidad Autónoma Vasca, entre el 25 de noviembre y 19 de diciembre de 2011, según ha dado a conocer el equipo del Euskobarómetro, encabezado por Francisco Llera.

Según los datos recogidos, un 78 por ciento apoya una negociación entre ETA y el Gobierno, aunque el 44 por ciento la condiciona, y el 75 por ciento está de acuerdo con el acercamiento de presos.

Por otro lado, un 72 por ciento de los ciudadanos vascos dice sentir los efectos de la crisis económica y son algo más de un tercio (37%) los que la perciben con mayor intensidad. La preocupación por el empleo (62%) se estanca en el último semestre, manteniéndose en primer lugar.

Le sigue la preocupación genérica por la situación económica (18%), con un avance semestral de 6 puntos, y la tercera posición la ocupan un conjunto de problemas agrupados bajo el epígrafe de "desigualdades sociales y bienestar" (10%), tras un ligero avance semestral. A mayor distancia se sitúa la preocupación por la situación política (2%), la vivienda (2%) o la violencia (1%).

Además, el 47 por ciento de los ciudadanos vascos consideran que el resultado obtenido por Amaiur en las pasadas elecciones generales del 20 de noviembre puede ser "positivo" para la política vasca, frente a un 21 por ciento que lo cree "negativo", un 23 por ciento que se muestra "escéptico" y un 9 por ciento no tiene opinión al respecto.

Asimismo, el 32 por ciento de los ciudadanos vascos sigue manifestando tener grandes deseos de independencia, tras un retroceso semestral de cuatro puntos, frente al 58 por ciento que dice tener pocos o ninún deseo de independencia.

La sociedad vasca está bastante dividida sobre la posibilidad de adelantar elecciones autonómicas o no, aunque vence, por escasa diferencia, la opción de que no se anticipen los comicios, un 43 por ciento frente a un 42 por ciento. Además, el Gobierno de Mariano Rajoy se estrena con un record de desconfianza entre los vascos, el 83 por ciento es escéptico con el Ejecutivo popular y cree que no habrá cambios respecto al Goierno de Zapatero.