El dirigente de Movemento Galego ao Socialismo, Rafael Vilar, ha llamado a los simpatizantes de esta corriente nacionalista a apoyar, en la segunda vuelta de votaciones para elegir al portavoz nacional del BNG, a Guillerme Vázquez, quien opta a la reelección en este puesto como representante de la Alternativa pola Unidade (ApU), auspiciada por la UPG.

Vilar ha realizado este llamamiento entre reproches a Xosé Manuel Beiras, candidato a portavoz nacional de la lista conjunta de Máis Galiza y Encontro Irmandiño, a quien reconoció su "contribución histórica" al nacionalismo, algo que contrapuso con "sus posiciones públicas en los últimos tiempos de desgaste y desafección con la organización".

Frente a ello, situó el "compromiso y dedicación" de Guillerme Vázquez, así como su "buena disposición" hacia el Movemento Galego ao Socialismo, precisamente una escisión por la izquierda de la UPG. Vilar ha señalado que es "necesario consolidar" el "cambio de rumbo" iniciado en el BNG.

El apoyo de Movemento Galego ao Socialismo decantaría las votaciones en la segunda vuelta a favor de la ApU, ya que sumaría los 248 votos que consiguió en la primera ronda a los 2.164 de la lista controlada por la UPG. En la primera votación, la lista liderada por Guillerme Vázquez sacó sólo una ventaja de 138 votos a la candidatura de Beiras.

"más nosotros"

Los reproches a Beiras se reprodujeron en la intervención de Guillerme Vázquez para defender su candidatura, aunque de una forma más velada. "Más nosotros y menos yo", reclamó que sea la actitud de los dirigentes que trabajan por el frente nacionalista, para conseguir "un proyecto colectivo, alternativo, coherente y útil socialmente".

"Me comprometo a trabajar con lealtad por un BNG más plural, pero unido. Más plural, pero unido", recalcó. Asimismo, se comprometió a ejercer la portavocía nacional "con rigor y responsabilidad, respeto a los compañeros y asunción de las decisiones colectivas" y remató su intervención expresando "el orgullo de ser del BNG, hoy y mañana".

Epílogo político

Por su parte, en medio de un auditorio dividido entre aplausos y silbidos, Beiras se ha referido a la "situación absolutamente crítica" que cree que vive el nacionalismo gallego y ha apostado por "conseguir el restablecimiento del respeto recíproco y del derecho a la discrepancia". Asimismo, ha reivindicado el "esfuerzo" que hizo "muchos años" a favor del nacionalismo y ha subrayado que "nunca" quiso "poder personal, sino que trabajó "para encajar el eje del proyecto común".

"No tengo futuro político. Estoy en un epílogo. Apoyadme, si no, no pasa nada", ha proclamado el exportavoz nacional del BNG, de 75 años de edad. En este sentido, ha reivindicado que toda su vida peleó "en dos coordenadas: lealtad al proyecto y a las clases más agredidas". "Siempre di la cara, nunca escurrí el bulto. Sigo siendo el mismo de siempre. Viva el pueblo gallego, viva la nación gallega, viva el BNG de 1982 puesto al día", ha concluido en referencia a la asamblea constituyente del frente celebrada aquel año en Riazor (A Coruña).