El PP «rompe» con el Gobierno, y Batasuna quiere legalizarse.

Rajoy anuncia a Zapatero que le retira su apoyo hasta que «esta ignominia no se rectifique». El Congreso rechaza la moción de los populares que pedía no dialogar con Batasuna.
Duras palabras las que lanzó ayer en el Congreso el líder del PP. Mariano Rajoy anunció con tono muy grave que «rompe toda relación y todo apoyo al Gobierno» en el proceso de paz en el
País Vasco «mientras esta ignominia no se rectifique».

Rajoy aseguró que no puede «permanecer impasible» a la «claudicación» del Ejecutivo y calificó a Zapatero de mentiroso, ya que «dijo que no hablaría con formaciones ilegalizadas» (Batasuna) y «les ha regalado una mesa», en referencia a una hipotética reunión de partidos que incluiría a la izquierda abertzale. Batasuna anunció ayer su deseo de ser legalizada «si es necesario para formar la mesa de partidos».

Por su parte, el presidente, Zapatero, criticó el «juego hipócrita» de los populares, ya que el PSOE sí apoyó el Gobierno de Aznar en anteriores treguas. También reiteró su voluntad de «acometer un proceso de paz» en el que «no se pagará un precio político».

Recapacitar la decisión

Por último, Zapatero pidió al PP que recapacite su decisión y aseguró que no empezará el diálogo político sin el consenso de todos los partidos.

El divorcio entre el Gobierno y los populares se venía fraguando desde el 30 de mayo, cuando los socialistas vascos anunciaron que iban a reunirse con Batasuna. Desde ese día, el PP subió el tono de sus críticas, amenazando con liquidar su apoyo al Ejecutivo, una ruptura que ya es oficial. Una vez finalizado el debate, el Congreso rechazó una moción del PP que exigía que no se negociara con Batasuna. Ningún partido político apoyó la propuesta.

La concejala socialista en Getxo, Gotzone Mora, fue expulsada del Congreso tras increpar al presidente. «Soy del PSOE, ¿en nombre de quién hablas?», gritó desde tribuna.

Los etarras ya han perdido

Antonio Elorza. Catedrático historia del pensamiento y movimientos políticos

El  proceso de paz en el País Vasco, que en este momento vive una etapa de prenegociación, se debe mantener. El PP hace mal en oponerse a este proceso, debe formar parte de él, aunque sí es lícito que critique algunos de sus aspectos, como si Batasuna debe ser legalizada o la falta de comunicación que, al parecer, existe entre el Gobierno y los populares, que debe ser mucho más fluida. La rigidez del PP en oponerse a las primeras negociaciones lo convierte en un frontón. El PP debe ser consciente de que ETA y Batasuna ya han perdido la guerra, los etarras están cercados. El PSOE, por su parte, se debilitará si su capacidad negociadora no cuenta con el apoyo de los populares.

Esta falta de entendimiento entre los dos partidos mayoritarios es contraproductiva, lo único que hace es que los terroristas tengan condiciones más ventajosas a la hora de sentarse a negociar. El presidente del Gobierno, no obstante, está dando la imagen de que negocia con un vendedor (ETA) que sabe que el comprador (el Ejecutivo) quiere comprar a toda costa.

Reunión entre el PP y Batasuna en 1998

En la tregua de 1998, el Gobierno de Aznar se reunió con  Batasuna, según el líder abertzale, Arnaldo Otegi. Era el 11 de diciembre del año 98, el secretario general de la Presidencia, Javier Zarzalejos; el número 2 de Interior, Ricardo Martí Fluxa, y el asesor del PP, Pedro Arriola, se reunieron en un chalé de la comarca de Juarros (Burgos) con la dirección de Herri Batasuna: Otegui, Pernando Barrena, Rafa Diez Usabiaga e Iñigo Iruin. La reunión duro más de tres horas. La Guardia Civil despejó el camino a los abertzales, según contaron ellos mismos en el diario Gara.

Dos meses y medio de enfrentamientos y descalificaciones

El Gobierno

22 marzo, alto el fuego

Tras el anuncio de ETA, Zapatero asegura que comprobará que el cese de la violencia es total antes de iniciar el diálogo político.

28 de marzo, primera entrevista entre Rajoy y Zapatero

Zapatero anuncia que mantendrá una comunicación «directa y exclusiva» con el PP y que convocará el pacto antiterrorista.

3 de mayo, el gobierno asegura que el alto el fuego es real

El Ejecutivo asegura que hay tres informes policiales que lo confirman y que ETA no está detrás de los dos ataques de kale borroka de abril.

21 de mayo, se anuncia el inicio del diálogo con ETA

Zapatero anuncia que en junio comunicará a los partidos políticos el inicio del proceso de diálogo con ETA para poner fin a la violencia.

2 de junio, PP y PSOE ‘rompen’

El Ejecutivo iniciará el diálogo sin el apoyo del PP, aunque intentará tener su apoyo. «No admitiremos más descalificaciones del PP».

El PP

22 marzo, alto el fuego

El PP asegura que alto el fuego confirma que el Gobierno ha mentido al negar que mantenía contactos con los etarras.

28 de marzo, primera entrevista entre Rajoy y Zapatero

Rajoy da su apoyo al Gobierno «para acabar con ETA» y le exige que verifique si el cese de la violencia «es total e irreversible».

3 de mayo, el gobierno asegura que el alto el fuego es real

Rajoy afirma que su apoyo a ZP no incluye dar contrapartidas a ETA «ni Navarra ni autodeterminación ni legalización de Batasuna».

21 de mayo, se anuncia el inicio del diálogo con ETA

Afirma que el Gobierno no tiene su aval para empezar ningún diálogo con los etarras, sólo para verificar que se han disuelto.

2 de junio, PP y PSOE ‘rompen’

Rajoy acusa a Zapatero de romper

el pacto antiterrorista, de engañar a los españoles y de ceder al chantaje de ETA. Lo llama «indigno».

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