Para ofrecer una prueba fiable de conocimientos existen diversos baremos. Cada test implica realizar un examen con diversas pruebas que miden la comprensión auditiva y lectora, así como la redacción y la expresión oral.

Existen dos sistemas principales: el americano, promovido por la organización ETS –que comercializa tests como TOEFL y TOEIC–, y el británico, cuya referencia son los certificados de la Universidad de Cambridge.

Los diferentes test

TOEFL: Prueba de nivel que piden unas 6.000 instituciones académicas de todo el mundo, incluyendo todas las universidades estadounidenses y muchas inglesas.

También se exige en becas Erasmus y Leonardo. Evalúa la comprensión oral, escrita y la estructura y el lenguaje.

Precio aproximado: 140 euros. Más información en: www.sp.toefl-europe.com.

TOEIC: Es el equivalente del anterior para el mundo laboral. Lo piden tanto empresas (Iberia, Renault...) como organismos públicos (Agencia Tributaria). Mide la capacidad de la persona para comunicarse en un entorno laboral. La puntuación va de 10 a 990 puntos.

Hay cinco niveles, de novato a profesional avanzado. Un director de marketing, por ejemplo, necesita al menos 750 puntos, que corresponden al nivel de profesional limitado. Ése es también el nivel que piden las escuelas de negocio.

"Hacen falta unas 100 horas de formación para subir un nivel", aclara Gabriela Almi, directora de ETS Europe.

Precio: unos 90 euros. Más información: www.toeic.eu

Cambridge: Su certificado más conocido es el First Certificate, que acredita un nivel intermedio en el dominio del inglés. Hay tres escalones de aprobado.

Para obtenerlo hace falta haber estudiado "cuatro años de inglés, más otro de preparación para el examen", indica Caroline Cooke, coordinadora de exámenes del British Council.

Precio: 158 euros, aproximadamente. (www.britishcouncil.org/es/spain-exams-fce.htm).

Ninguno de los títulos caduca, pero el nivel de un idioma se puede mantener estable dos años; después, o mejora o baja. Las universidades, por ejemplo, no aceptan un certificado con una antigüedad mayor de dos años.

Prepararse y examinarse

En las librerías existen manuales para la preparación por libre de estos exámenes, aunque en el fondo se trata "de estudiar el idioma y exponerse a esa lengua por medio de películas, libros, música, etc.", aclara Gabriela Almi.

De todas formas, se recomienda hacer una preparación específica.

Por otro lado, existen infinidad de centros autorizados para realizar las distintas pruebas.