El líder de IU, Cayo Lara, ha arremetido contra Standard & Poors por su "injerencia intolerable" en la política española al haber instado al Gobierno a que lleve a cabo una reforma laboral, lo que, a su juicio, demuestra que la "voracidad" de los mercados no cambia.

En una rueda de prensa en la sede de IU, el coordinador federal ha criticado duramente a las agencias de calificación de riesgos por intervenir en la gestión económica de los países y ha señalado que todos los cambios que se han hecho para contentar a los mercados sólo han servido para pagar más intereses por la deuda soberana de los que se abonaban antes de emprender las reformas exigidas.

Así, ha apuntado que la "primera tanda" de recortes aplicada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, convalidada en el Congreso la pasada semana, no ha generado "aparentemente" más confianza en los mercados financieros. Y de hecho -ha recalcado- la prima de riesgo ha subido este lunes hasta los 354 puntos básicos, después de que Standard & Poors rebajara el viernes la deuda española a largo plazo dos escalones, de "AA-" a "A".

Por otro lado, mientras patronal y sindicatos siguen sin ponerse de acuerdo sobre la reforma laboral, Lara ha insistido en que ninguna reforma ha creado empleo en España y siempre fueron "una excusa" para limitar los derechos de los trabajadores. Como ejemplo ha puesto la última reforma que acometió el anterior Ejecutivo socialista, que, según él, ha generado más paro, despidos más baratos y no ha creado empleo fijo.

Cayo Lara ha recalcado la necesidad de dedicar un pleno monográfico al tema del empleo y ha vuelto a pedir que se promueva una mesa de partidos, sindicatos y patronal para que se trate el cambio de modelo productivo que es, en su opinión, la cuestión básica de todo el problema económico.

Aprovechando la visita a España del presidente francés, Nicolas Sarkozy, el líder de IU ha señalado también que confiaba en que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le pida que intervenga para que el Banco Central Europeo pueda comprar la deuda soberana de los países al 1% de interés y acabar así "definitivamente" con la especulación financiera internacional.

Mientras los gobernantes europeos no modifiquen las normas del BCE para que éste pueda comprar la deuda de los Estados al 1%, no se acabará "con esta sangría", ha afirmado el coordinador federal.