La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI.F) ha decidido no secundar la jornada de huelga en la administración pública regional el próximo día 29 de febrero en contra de las medidas del Gobierno de María Dolores de Cospedal porque, según asegura, más del 80 por ciento de sus afiliados está en contra.

La consulta realizada por CSI.F entre los afiliados, todos trabajadores públicos de la Junta, ha arrojado una "mayoría aplastante" en contra de sumarse a la huelga de empleados públicos, aunque comparten "en todos sus términos" el resto de acuerdos adoptados por los sindicatos para oponerse a las medidas "impuestas".

Para el sindicato, los resultados de la consulta son "contundentes" y reflejan la "responsabilidad" y el "compromiso" de los empleados públicos con la "delicada" situación económica y laboral que se está viviendo en Castilla-La Mancha.

"Los trabajadores no están dispuestos a afrontar una nueva jornada de huelga que reduciría de manera importante unos ingresos ya de por sí escandalosamente recortados", asegura el sindicato en nota de prensa, porque consideran que "no tendría consecuencias para sus demandas y sólo les acarrearía descuentos, mientras que el Gobierno de la Junta se ahorraría el sueldo de ese día".

Según CSI.F, "los trabajadores de la sanidad, la enseñanza y los servicios generales de la Junta, agredidos con estos recortes, nos reclaman otras opciones de protesta y rechazo que resulten más innovadoras, más efectivas y menos gravosas con su situación económica".

Es por ello CSI.F como, sindicato mayoritario entre los empleados públicos de nuestra región y partidario de mantener la unidad de acción sindical, seguirá realizando cuantas acciones considere eficaces en defensa de los intereses de los trabajadores y contra los "disparatados y poco efectivos" recortes económicos y laborales.