La empresa cántabra Eolicán, adjudicataria de la zona C del concurso eólico de la región, ha instalado las cinco primeras antenas de medición de recurso eólico en Campoo y Valdeolea.

Así lo ha anunciado en una nota de prensa esta empresa, que ha asegurado que estas instalaciones cuentan con los permisos y licencias municipales, así como el visto bueno de los informes de Cultura, Montes y Medio Ambiente.

Según ha explicado, con la instalación de estas antenas anemométricas, se pretende conocer "con total exactitud la calidad y cantidad" de recurso eólico de los montes donde la empresa pretende instalar siete parques de aerogeneradores.

La firma cántabra que, según ha señalado, lleva invertidos aproximadamente 4 millones de euros en la promoción de sus parques y en sus proyectos de I+D+i comprometidos en la adjudicación del concurso eólilco, es la "primera" de las siete adjudicatarias en acometer esta operación.

Adjudicataria de la zona C del concurso eólico de la región, tiee asignada una potencia máxima de 210 Mw en los municipios de Campoo de Enmedio y Valdeolea.

Eolicán prevé una inversión global de unos 300 millones de euros en la promoción de estos parques y en las actuaciones industriales y de I+D+i vinculadas, siempre y cuando pueda completar el cupo máximo de potencia.

Según ha explicado, la instalación de las antenas anemométricas es un "paso preceptivo" a la construcción de los parques puesto que las empresas promotoras necesitan certificar el recurso eólico de la zona asignada con métodos fiables y contrastados, de modo que puedan conseguir una explotación racional de los parques y una financiación adecuada.

Ha añadido que, como sucede con cualquier actuación urbanística, este tipo de instalación está sometida a una normativa y a la concesión de permisos y licencias y se trata de una tramitación municipal de varios meses que ha de contar asimismo con informes favorables por parte de la administración regional, en concreto de los servicios de Urbanismo, Cultura, Medio Ambiente y Biodiversidad.

Las torres miden unos 60 metros de altura y están equipadas con varios anemómetros y un sistema de transmisión de información, que envía datos en tiempo real a las oficinas centrales de Eolican.

Las antenas estarán en funcionamiento durante dos años midiendo las condiciones de viento en las diferentes estaciones del año, y luego, transcurrido este tiempo, serán retiradas.

El director general de la firma, Fernando Rivas, ha afirmado que Eolicán es una empresa cántabra "que quiere crear riqueza en Cantabria" y ha opinado que "los primeros beneficiados por la construcción de un parque eólico son los municipios afectados" por los miles de euros que pagan los promotores en concepto de licencias y permisos, así como por los pagos derivados del aprovechamiento de terrenos privados o comunales, los impuestos locales, y la contratación de mano de obra en la zona para el mantenimiento de las infraestructuras.

Ha señalado que, de forma genérica se calcula que el 7 por ciento de la inversión en un parque se queda en el municipio.

Por otra parte, ha subrayado que la promoción de un parque eólico beneficia, a su juicio, a un "extenso entramado de empresas auxiliares" de ingeniería, eléctricas, constructoras y de transporte, entre otras. "Eolicán está contratando la mayoría de estos servicios en Cantabria", ha garantizado.