Bajo el lema 'Stop accidentes', más de un centenar de padres y madres del colegio Virgen del Carmen de El Rompido, en Cartaya (Huelva), exigen que se adopten medidas de seguridad tras el grave accidente de un autobús escolar que ha llevado a una mujer a estar ingresada en estado crítico en la UCI del hospital Juan Ramón Jiménez.

Según ha informado el colectivo en un comunicado, "la ausencia de Policía local, las peligrosas maniobras de los autobuses de transporte escolar y la precaria señalización vial", son algunas de las causas que "ponen en riesgo a diario" a los alumnos de Infantil y Primaria.

Por ello, el colectivo de padres y madres del colegio público Virgen del Carmen de El Rompido ha mantenido este viernes una protesta a las puertas del centro como muestra de su indignación por "la desidia" del Ayuntamiento de Cartaya, la Delegación de Educación y la empresa encargada del transporte escolar a la hora de actuar "con contundencia y celeridad" tras el accidente del 22 de diciembre de 2011.

Ese día una persona resultó herida grave y permanece ingresada en estado crítico, cuando un autobús derribó a las puertas del colegio y a la hora de entrada de los escolares una señal de tráfico que impactó sobre ella causándole lesiones de extrema gravedad. En el momento del suceso, el acceso al centro carecía de agentes de la Policía local que regularan el intenso tráfico de esa hora y facilitaran el acceso de viandantes al centro escolar.

Destacan que el colegio de El Rompido "carece de manera habitual de dicha vigilancia". Hasta el centro llegan a diario dos autobuses escolares y multitud de vehículos privados, algunos de los cuales se detienen "indebidamente en zonas no autorizadas, conducen a excesiva velocidad o ejecutan maniobras arriesgadas, poniendo en peligro a los viandantes".

"Desgraciadamente, éste ha sido un trágico aunque previsible accidente con consecuencias de extrema gravedad", han señalado, a la vez que han recordado que desde que el centro abrió sus puertas hace tres años y tiene asignado el servicio de transporte escolar, la Asociación de Madres y Padres, el consejo escolar en el que está representada toda la comunidad educativa y la dirección del colegio han advertido "de manera reiterada" tanto al Ayuntamiento de Cartaya, como a la Delegación de Educación como a la propia empresa de transporte escolar de "la peligrosidad" que supone "el desorden del tráfico en los horarios de entrada y salida del centro, la falta de seguridad en los accesos y el riesgo de que cualquier día pueda ocurrir una desgracia".

Los padres manifiestan que "no van a permanecer inmóviles" mientras sus hijos siguen expuestos al peligro, por lo que lamentan "la falta de respuesta" de las administraciones y anuncian que seguirán adelante con las protestas.