La estación de esquí de Boí Taüll está negociando la refinanciación de su deuda con cinco entidades bancarias, entre ellas el Institut Català de Finances (ICF), a las que les ha planteado la posibilidad de cambiarla por acciones, según ha confirmado a Europa Press el consejero delegado de Boí Taüll, Jordi Sabaté.

"Se trata de gestionar la deuda del complejo, con seis hoteles y la estación de esquí, que tiene margen bruto de explotación positivo", ha señalado.

Estas propuestas tienen como objetivo garantizar a largo plazo la continuidad del dominio esquiable de la Alta Ribagorça, según ha adelantado este martes el diario Segre.

El principal accionista es la inmobiliaria Nozar, que desde 2009 está en concurso de acreedores, que truncó el proyecto de ampliación del dominio esquiable.

El Govern, a través de Ferrocarrils de la Generalitat, ya gestiona Espot y Por Ainé (Pallars Sobirà) en Lleida y Vall de Núria (Ripollés) y La Molina (la Cerdanya) en Girona.