El nuevo director general de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, ha manifestado este martes en su toma de posesión que la seguridad es un "bien público esencial" por lo que ha asegurado que la eficacia del servicio del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) "no se verá mermada en ningún caso" a pesar de "la dramática crisis económica" que vive España.

Cosidó, que ayer juró el cargo en el Ministerio del Interior, se ha mostrado "convencido" de que el Cuerpo Nacional de Policía será "un ejemplo" de cómo afrontar ese reto y ha destacado como uno de los principales desafíos "optimizar la gestión".

En este sentido, ha coincidido con el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que ha insistido en que el Ejecutivo, "dentro de sus posibilidades", tiene previsto "hacer todo el esfuerzo necesario para mantener y reforzar los recursos humanos y materiales" de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado "y con ello poner a su disposición los medios necesarios para afrontar la ardua tarea que les compete".

En su discurso, el nuevo director general de la Policía ha recordado a los policías que murieron asesinados por ETA mientras cumplían con su deber "defendiendo la democracia y la libertad", momento en el que ha realizado una mención especial al último policía nacional asesinado por ETA, Eduardo Puelles.

En este sentido, Cosidó ha manifestado su "más firme compromiso con la derrota del terrorismo y en la lucha contra toda forma de criminalidad". Para ello, ha asegurado que "dedicará todos sus esfuerzos" y trabajará "sin descanso" dando "lo mejor" de sí mismo por el Cuerpo Nacional de Policía a quienes se ha referido como "una de las mejores policías del mundo".

A su juicio, la Policía "jamás debe ser instrumentalizada al servicio de ningún otro interés que no sea el general" por lo que ha considerado que los agentes deben hacer su trabajo "sin interferencias de ningún tipo".

Nuevo estatuto de policía.

Asimismo, Cosidó ha señalado que la política de personal como las condecoraciones, destinos y ascensos estarán reguladas por criterios "objetivos" de mérito, capacidad y antigüedad, aspectos que quedarán recogidos en el nuevo estatuto de personal en el que se ha comprometido a trabajar "de inmediato".

Aunque no ha querido establecer prioridades, Cosidó se ha marcado retos como la derrota del terrorismo, el crimen organizado, la seguridad ciudadana, la inmigración ilegal, y el tráfico de seres humanos, entre otros, objetivos que se desarrollarán en torno a dos "pilares básicos de actuación": la cooperación con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y la colaboración internacional.

"Las puertas de mi despacho estarán siempre abiertas. Creo firmemente en el diálogo y tengo la esperanza de que a pesar de las discrepancias podamos mantener la colaboración con todos los sindicatos policiales por la seguridad de los ciudadanos. Vamos a trabajar desde la transparencia y con un compromiso absoluto por la verdad", ha añadido.

Finalmente, el nuevo director general de la Policía ha tenido palabras de agradecimiento para sus predecesores en el cargo con especial mención para Francisco Velázquez, presente en el acto. También ha querido destacar el apoyo de sus padres, mujer e hijos. "Me temo que ellos van a ser los grandes sacrificados con este nuevo destino".

Mucho camino por recorrer

El ministro ha reconocido la "labor, esfuerzo y enorme capacidad de sacrificio" de los miembros de la Policía y les ha recordado que, pese a los pasos dados, no se puede "bajar la guardia" ante los nuevos retos que suponen formas delictivas como el terrorismo, el crimen organizado o el tráfico de seres humanos, drogas y armas. "Queda mucho camino por recorrer y mucho trabajo por realizar", ha animado.

En su discurso, durante el que también ha recordado a los policías asesinados por ETA, ha felicitado también al Cuerpo por su trabajo contra la pornografía infantil, "uno de los delitos más miserables y repugnantes", y les ha agradecido su constante trabajo para erradicar la violencia de género.

En el acto han estado también presentes el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, el nuevo JEMAD, almirante general Fernando García Sánchez, el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Víctor Calvo, y el embajador de Francia, entre otros.

Precisamente, la cooperación internacional en el combate del crimen internacional ha sido destacada tanto por Fernández Díaz como por Cosidó como uno de los objetivos principales durante los próximos años para los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.