Las ventajas de la tarjeta electrónica han servido para ir desplazando al bonobús tradicional. El abono de plástico permite hacer los transbordos que se deseen durante una hora. Por ello, sólo uno de cada diez viajeros paga con cartón.

Además, un cambio en la validadora, a petición de los clientes, hará más cómodo el uso de la tarjeta bus. El mensaje que aparecerá a partir de ahora indicará dos datos: el número de viajes que todavía se pueden realizar y el importe que queda en la tarjeta.

El proceso de desaparición del bonobús de diez  viajes se realizará de forma paulatina hasta el 15 de septiembre. El plazo para realizar el canje del importe de los viajes no consumidos será ilimitado y tendrá que realizarse en la Oficina de Atención al Cliente de Tuzsa (en el pasaje Independencia). El dinero se cargará en una tarjeta electrónica vigente.

Usuarios esporádicos

En la Oficina de Atención al Cliente de Tuzsa (en el centro Independencia) se ofrece información sobre los beneficios de la tarjeta bus. Además, se entregan folletos sobre la forma de funcionamiento. Así se intenta que los colectivos que en la actualidad siguen adquiriendo bonobuses (personas mayores, turistas y usuarios esporádicos) vayan cambiando de hábitos.