El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha considerado que el Gobierno de Castilla-La Mancha debería reconocer que "no se hizo bien" en relación a los centros de la mujer, después de que "haya rectificado" y haya decidido prorrogar los convenios con las entidades locales para esos centros y las casas de acogida.

A preguntas de los medios por esa prórroga, publicada este viernes en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM), García-Page se ha alegrado de que el Ejecutivo de María Dolores de Cospedal haya rectificado porque le "disgustaba mucho" la forma en como les habían comunicado "que iban a prescindir de este servicio".

"Cuando uno recibe una carta, por la tarde, en el último minuto del último día de plazo para renovar o no los convenios, y sabe que de eso dependen contratos, personas, familias y servicios importantes, realmente no es que piense mal, es que o no se tienen las cosas claras o no se tiene buena fe", ha manifestado.

A su juicio, la publicación de la prórroga en el DOCM "significa el reconocimiento de que antes se había hecho mal y sería bueno que alguien dijera que antes no se hizo bien", ha insistido el primer edil.

No obstante, ha señalado que esta decisión tiene ahora que llevar a los ayuntamientos "a conseguir el mejor acuerdo posible con la Junta", sabiendo que si no hay un acuerdo las competencias son autonómicas y "si alguien tiene que tener interés por que ese servicio vaya bien es la Junta".