A 1 de diciembre de 2011, 1.867.407 trabajadores autónomos cobraban una pensión cuya media mensual se situaba en 568,34 euros, cantidad muy por debajo de la media del sistema (que está en 810,85 euros) y especialmente mucho más reducida que la media correspondiente al Régimen General, que a la misma fecha era de 961,66 euros, según los datos publicados por la Administración de la Seguridad Social.

El secretario general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Sebastián Reyna, ha subrayado la diferencia de casi 394 euros entre la pensión media de un trabajador jubilado del Régimen General y la de un pensionista del Régimen de Autónomos.

Este dato distancia aún más las medias de los diversos regímenes, ya que el Régimen General durante el año 2011 ha ganado una media de 14 euros en la pensión media, mientras que en el de autónomos el incremento en el año ha sido escasamente de ocho euros, según Reyna.

"La diferencia se sigue incrementando, lo que no es un buen dato de evolución de las pensiones de un colectivo que sigue cotizando demasiado por debajo de sus ingresos reales", añadió.

UPTA espera que la aplicación de algunas medidas contempladas en la Ley de Actualización del Sistema de Seguridad Social pueda mejorar esta situación en el futuro.

En particular por el incremento de las bases medias de cotización, aún por desarrollar, y la posibilidad de que los mayores de 50 años puedan cotizar por una base cualificada de hasta el 220% de la base mínima.

Para los representantes de los autónomos, esto permitiría aumentar las medias de cotización de forma voluntaria en más de un 20% con respecto a la situación actual para este colectivo de edad, que estaba topado en la elección de la base.

El secretario general de UPTA se dirigirá en los próximos días a la nueva ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Bañez, con el fin de "recordarle" la necesidad de establecer instrucciones para adaptar la cotización de los autónomos a las nuevas normas establecidas, o bien para desarrollar algunas medidas, como es el caso de la cotización parcial, que permitan un aumento de cotizantes en el sistema y, en consecuencia, una "mayor protección" para todo el colectivo del trabajo independiente.