El Govern ha aprobado la instalación de una planta de generación eléctrica con biomasa en s'Aranjassa (Mallorca), que se prevé que entre en funcionamiento a principios de 2013, la cual permitirá crear 25 puestos de trabajo y producir energía suficiente como para abastecer a 2.700 hogares durante un año.

El proyecto ha sido presentado por el vicepresidente económico, Josep Ignasi Aguiló, en una rueda de prensa en compañía del conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company; el director general de Industria y Energía, Jaime Ochogavía; y el gerente de la empresa impulsora del proyecto Reciclatge Verdera, Sebastià Salvà.

Se trata de un proyecto de energía renovable con el que se pretende generar electricidad a partir de restos recogidos en las limpiezas forestales, tales como troncos o ramas, con los que se producirá gas combustible, llamado 'gas de síntesis', el cual, una vez ha pasado por un proceso de limpieza, se utiliza como combustible de motores de combustión interna para generar electricidad.

Para llevar a cabo la planta se prevé una inversión de seis millones de euros, que serán aportados íntegramente por la empresa privada impulsora del proyecto, con el que se prevé generar 25 puestos de trabajo, ocho directos y 17 indirectos.

Aguiló ha indicado que se trata de la primera empresa que implanta este tipo de tecnología en España, la cual, a partir de restos orgánicos, evita la generación de alquitranes.

El vicepresidente ha señalado que la planta generará entre 1,5 y 2 megavatios, los cuales se inyectarán a la red eléctrica pública al precio marcado por el Gobierno central.

El proyecto dio sus primeros pasos en julio de 2009, si bien ha estado "parado" en la Conselleria hasta ahora, cuando se ha "acelerado" la tramitación de los permisos correspondientes, ha detallado Company.

Procesos de la planta

Para convertir los restos orgánicos en electricidad, la futura planta llevará a cabo un proceso de tratamiento en el que, tras la recogida de biomasa forestal, ésta se seleccionará, clasificará y tratará.

A continuación, se secará por convertirla en un combustible apto para calderas domésticas e industriales para la producción de 'gas de síntesis'.

Después, se generará energía eléctrica con seis motores de 250 kilovatios más un OCR de 125KW (con el gas de síntesis obtenido del proceso de gasificación) para transferirlo a la red.

Asimismo, se aprovechará casi el cien por cien del calor emitido con el secado de la biomasa y la cesión de calor a una planta de Emaya.