La aVM organiza jornadas de formación en Castellón y Alfas del Pí para acabar con el intrusismo en el sector del taxi

La Agencia Valenciana de Movilidad (aVM) perteneciente a la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, va a organizar próximamente unas jornadas de formación específica de inspección del taxi en Castellón y en el municipio alicantino de Alfas del Pí con el objetivo de informar al sector del taxi y agentes de la Policia Local, de las medidas para erradicar las irregularidades que se puedan detectar dentro del sector, ha informado el organismo.
Un taxi
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EUROPA PRESS
Un taxi

La Agencia Valenciana de Movilidad (aVM) perteneciente a la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, va a organizar próximamente unas jornadas de formación específica de inspección del taxi en Castellón y en el municipio alicantino de Alfas del Pí con el objetivo de informar al sector del taxi y agentes de la Policia Local, de las medidas para erradicar las irregularidades que se puedan detectar dentro del sector, ha informado el organismo.

Esta medida pretende "fomentar el uso del taxi de calidad, y concienciar a los ciudadanos de los beneficios, tanto a nivel de seguridad como de comodidad y repercutir en un mayor número de servicios". Además, la aVM promueve esta campaña con la finalidad de apoyar al sector del taxi en los tiempos de crisis actuales, han explicado las mismas fuentes en un comunicado.

La jornada es para informar del régimen especial de recogida de viajeros de estos municipios, intrusismo y otras cuestiones relevantes. Además, inspectores y policía local actuarán para detectar las infracciones dentro del sector.

Los fines que debe cumplir la inspección son el comprobar el grado de cumplimiento de la normativa vigente, proteger los derechos de los consumidores y operadores del transporte, mejorar la calidad y seguridad del servicio y erradicar el intrusismo.

De esta manera, se sancionarán con apercibimiento o multa de hasta 1.000 euros las infracciones calificadas como leves. Se sancionarán con multas comprendidas entre 1.001 a 2.000 euros las infracciones calificadas como graves y por último, se sancionarán con multa de 2.001 a 6.000 euros las infracciones clasificadas como muy graves.

Esta medida está vinculada a la Ley de la Movilidad que entró en vigor el 3 de mayo de 2011, la cual contempla un régimen específico de infracciones y sanciones en materia del taxi.

En este sentido, con esta medida cabe destacar la voluntad del Consell en llevar a cabo esta actuación que tiene por objeto mejorar la calidad del taxi. Además, la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente ha realizado una inversión en transporte "como nunca se ha realizado para que el transporte de calidad llegue a todos", han concluido.

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