El presidente del PSE-EE, Jesús Eguiguren, ha afirmado que su cargo siempre está a disposición de Patxi Lopez si alguien cree que está "perjudicando" al lehendakari. Por otra parte, ha afirmado que le gustaría ir a ver a Arnaldo Otegi para "darle un abrazo" y ha asegurado que "piensa hacerlo".

En una entrevista a Onda Cero, Eguiguren se ha referido, de esta manera, al Comité Nacional del PSE-EE celebrado este pasado sábado, en el que, según algunas informaciones publicadas, miembros del partido le realizaron algunos reproches en el sentido de que podría estar perjudicando a Patxi López. Eguiguren habría trasladado su disposición a dejar su cargo si se consideraba que eso estaba ocurriendo, si bien López le trasladó su apoyo en la reunión.

Eguiguren ha señalado que puede parecer "que hubo alguna discusión" pero ha asegurado que no se sintió "especialmente criticado" en esa reunión porque también hubo intervenciones de "apoyo" hacia él y ha añadido que, además, él no era el objeto de ese Comité.

Preguntado por si puso su cargo a disposición de Patxi López, ha respondido que, si alguien le dice que sus intervenciones y actitudes le pueden "perjudicar" al lehendakari, "por supuesto siempre está a su disposición". Ante el apoyo que le trasladó Patxi López, Eguiguren ha manifestado que ocurrió "con naturalidad" y ha señalado, por otra parte, que él siempre se ha sentido apoyado.

Respecto a si se arrepiente de las palabras pronunciadas sobre Patxi López con motivo de la Conferencia de Paz celebrada en el Palacio Aiete en las que aseguró que el lehendakari debería "haberse quemado por la paz", ha recordado que rectificó y que dijo que había sido "injusto". OTEGI

Por otra parte, ha manifestado que no ha visto a Arnaldo Otegi desde hace tiempo y no ha acudido a la cárcel porque se le haría "un poco extraño" debido a que a algunos compañeros socialistas "no les gustaría que fuera a verlo".

No obstante, ha asegurado que "piensa hacerlo", ya que le gustaría ir a verle para "darle un abrazo". "El contacto a través de terceras personas no lo he perdido nunca", ha añadido.

El dirigente socialista ha señalado que cree que él, "junto a sus compañeros" y también "a Otegi y compañía" ha "contribuido eficazmente" a que Euskadi "pueda vivir en paz".

Eguiguren ha señalado que, en los primeros momentos, de los encuentros con Otegi, a principios del año 2000, "no lo sabía absolutamente nadie".

Según ha indicado, estuvieron cinco ó seis años sin que "apenas nadie se enterara" de los contactos que estaban manteniendo y ha precisado, en un momento determinado, le dijo a Patxi López que se estaba reuniendo con Otegi.

"Él supongo que daría a conocer a algunas personas, pero creo que nunca se trató en ninguna Ejecutiva, ni del PSE-EE, ni de Bastasuna esas conversaciones", ha indicado Eguiguren que ha añadido que, al ser la izquierda abertzale un partido "formalista", tuvieron que "firmar un papel donde decíamos de que se iba a hablar".

Eguiguren ha señalado que esas conversaciones estaban pensadas para "poner en contacto al PP con ETA". El presidente del PSE-EE ha recordado que cambió el Gobierno y finalmente se logró, "de alguna forma", poner a los gobiernos "en contacto".

Respecto a las reuniones en Suiza con miembros de ETA, ha indicado que nunca albergó "ningún temor" y ha señalado que existía una "cierta obsesión" por parte de Josu Urrutikoetxea en que se pudieran llegar a un acuerdo, en el que también estuviera el PP. "Al principio pusieron mucho empeño, luego cambiaron de interlocutores, cambiaron de planteamientos y aprovecharon la actitud del PP para hacernos chantaje", ha agregado.

Eguiguren ha indicado que sus últimos contactos fueron después del atentado de la T4 en Madrid. Según ha precisado, ya no se estaba negociando porque la "negociación se rompió" con esa acción terrorista. El dirigente socialista ha reiterado que hubo personalidades como Tony Blair y Gerry Adams que les transmitieron que ETA iba a hacer una oferta, "acudimos a Suiza, no hubo tal oferta y ahí se acabó".

Publicación libro

En relación a la publicación de su libro y al hecho de que salga a la luz ahora y no antes, ha reconocido que "efectivamente" se lo prohibieron pero ha añadido que "no hacía falta que se lo prohibieran" porque "el momento es ahora cuando ETA ha terminado, cuando ha habido un cambio de gobierno y cuando la situación política obliga a los vascos, a los españoles a afrontar con letras mayúsculas la política".

A su juicio, publicarlo antes hubiera sido "un despróposito" por lo que "no era necesario que me lo prohibieran". Preguntado por si expresamente se lo prohibieron, ha respondido que "basta que me digan que es inoportuno" y, cuestionado por si fue el dirigente socialista Alfredo Pérez Rubalcaba el que lo hizo, ha indicado que "siempre suele andar por medio el señor Rubalcaba en estas cosas pero digamos que los que me rodeaban".

Eguiguren ha señalado que le trasladaron antes de las elecciones, aunque "no en vispera electoral" que no era oportuno y les hizo "caso".

Nuevo tiempo

En relación a la coyuntura actual, ha manifestado que se está en un momento que es el "umbral de un nuevo tiempo", pero que "todavía no sabemos muy bien por dónde irá". A su juicio, el hecho de que haya un nuevo Gobierno debería ser, en teoría, "bueno", porque los ejecutivos en su primera época "suelen tener más fuerza, más apoyos, pueden hacer casi todo lo quieran".

"El hecho de que sea de derechas, tampoco está mal porque son los que todavía siguen mandando en determinados ámbitos judiciales, económicos, eclesiásticos etc. Siguen mandando desde la reconquista", ha agregado.

Eguiguren ha añadido que el PP va a tener el apoyo del partido de la oposición y de los demás, por lo que "el momento, en teoría, no es malo para hacer cosas". El presidente del PSE-EE ha agregado que lo que ocurre es que, "en esta historia, parte fundamental corresponde a la izquierda abertzale, hay cosas que sólo ellos pueden hacer y, a veces, les veo poca humildad".

"Les veo más de resultados inmediatos y ahora es el momento de la calma y la tranquilidad, había que tener prisa para que no hubiera muertos, pero, una vez conseguido eso, vamos a hacer las cosas bien y con tiempo, porque, sino tiene el peligro de que todo sea falso, que las peticiones de perdón sean falsas, que las solidaridad con las víctimas sean falsas", ha añadido.

En relación al acto de víctimas celebrado este sabádo por los firmantes del Acuerdo de Gernika, ha señalado que no conoce lo manifestado, pero "se puede imaginar" que habrán "hablado de todas las víctimas".

"Es muy pronto para esas cuestiones solventarlas porque hay que tener en cuenta que todo se está desarrollando en este momento como si fuera una campaña electoral. Les piden desde Madrid que pidan perdón y estos van a pedir perdón, pero todo parece un juego para calmar reticencias en España o bien para ganar votos aquí. Yo creo que no hay ninguna sinceridad detrás de ninguna de esas cosas", ha señalado.

En este sentido, ha defendido que el perdón tiene que ser "de verdugo a la víctima, personalmente, a la familia", pero un "perdón colectivo, con una pancarta, creo que es campaña electoral".