El Ministerio de Medio Ambiente ha comunicado que es pronto para saber si se trata de nubes llegadas de África o son ejemplares autóctonos, eclosionados tras la sequía invernal y las lluvias primaverales.

La mariposa gamma es una polilla de unos cuatro centímetros de largo, de color marrón y un pequeño dibujo blanco en las alas que tiene la figura de la letra griega que le ha dado nombre.

Esta mariposa (Autographa gamma) vive alrededor de tres semanas, pero antes de morir, las hembras depositan del orden de 1.000 huevos en el suelo, a poder ser en prados verdes y huertos.

Es precisamente la fase de oruga la que, debido a su voraz apetito, puede ser considerada plaga si ataca a los cultivos.

La mariposa gamma puede llegar a reproducirse de tres a cuatro veces entre abril y octubre. Si las condiciones climáticas son favorables, en pocas semanas puede haber millones de ejemplares en el aire.

Viaja de noche y es atraída irremisiblemente por la luz, revoloteando alrededor de las lámparas y las farolas. Se pueden combatir con insecticidas autorizados, con trampas de luz o con trampas de feromonas.

Aunque todos los años hay mariposas gamma en territorio peninsular, raras veces se encuentran agrupadas en grandes nubes. La última vez que esto ocurrió fue en 1996, cuando invadieron la península desde territorios africanos.